Por la información que, a lo largo del tiempo, me han ido facilitando de NPG quisiera hacer algunos comentarios.
La decisión que ha tomado NPG de cambiar de auditores no ha sido una decisión alocada, ni tomada de la noche a la mañana.
Creo que ha sido una decisión meditada desde hace tiempo. Creo que ya hace mucho que desde NPG han ido viendo que estos auditores no estaban teniendo un comportamiento propio de auditores. No obstante, NPG tenía la confianza de que, a pesar de todo, podrían llegar a buen puerto. Pero el tiempo iba pasando y NPG no podía cumplir los hitos porque el asunto de las cuentas del primer semestre con los actuales auditores estaba bloquedado.
Si NPG hubiera sabido que, a estas alturas, el comportamiento de los auditores ha sido el que han tenido, hace ya mucho tiempo que desde NPG hubieran tomado esta decisión.
Creo que, aunque tarde, la decisión es la más adecuada.
Esperemos que con los nuevos auditores haya tiempo de poder presentar las cuentas del 2017 auditadas antes del 30 de abril, fecha límite para presentar al MAB.
Creo que, si se hacen las cosas bien, se puede conseguir, dado que los actuales auditores ya han revisado las cuentas hasta noviembre, con lo que quedaría muy poco del 2017 para revisar por los nuevos auditores. Elaborar una auditoria de las cuentas consolidadas de NPG año 2017 no tendría por qué llevarles mucho tiempo.
En fin, así es NPG, siempre sorprendente.
Lo dicho, (como en otras ocasiones), paciencia. paciencia y paciencia. ¿Hasta cuándo?.