Oslo sale al rescate de Norwegian, pero exige el compromiso de banca e instituciones privadas
Noruega finalmente saldrá al rescate de sus aerolíneas con garantías de crédito de 6.000 millones de coronas (500 millones de euros al cambio), pero ha puesto condiciones. La inyección de liquidez era precisamente la acción que habían planteado la mayoría de compañías del sector para para superar una crisis que creen que es temporal.
La compañía más beneficiada por esta línea de ayudas es Norwegian, a quien los analistas consideran como la más débil por su escasa liquidez, y obtendría la mitad de este importe. El resto, según Reuters, se destinará a SAS, Wideroe y otras pequeñas aerolíneas locales.
En concreto, el grupo dirigido por Jacob Schram cerró el año pasado con una liquidez equivalente a los ingresos de un mes, pero debe tenerse en cuenta que todas las compañías han ejecutado recortes drásticos en sus gastos variables y fijos, por ejemplo, con un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para 7.300 personas, el 90% de la plantilla, que en España afectará a unas 2.200 personas.
No obstante, existen condiciones. El Estado aportará el 90% del importe global, pero los directivos de Norwegian deberán buscarse la vida para obtener el 10% restante de bancos y otras instituciones privadas.
Otra medida implica que los acreedores de Norwegian (por ejemplo, los titulares de bonos) deberán renunciar al cobro de intereses durante, al menos, los próximos tres meses
Exigencia a propietarios y acreedores
"Norwegian ya tenía retos financieros antes de la crisis del coronavirus, y con este plan dejamos claro que tanto los propietarios como los acreedores tienen que contribuir a mejorar la situación financiera de la compañía si el Estado provee las garantías", ha afirmado en rueda de prensa la ministra de Industria, Iselin Nyboe. Dicho de otra manera, la compañía tiene que sanear su balance.
Noruega, Suecia y Dinamarca han sido los primeros países que han anunciado medidas concretas para asistir a aerolíneas en problemas, pero todo apunta a que habrá más, ya que Alemania y Francia se han mostrado abiertos. Estocolmo y Copenhague han lanzado un salvavidas de 270 millones de euros en forma de liquidez para la escandinava SAS.
Las aerolíneas de todo el mundo consideran que los diferentes gobiernos deberán facilitar créditos y medidas por entre 150.000 millones y 200.000 millones de dólares para garantizar la supervivencia del sector. Tres cuartas partes de las compañías tiene liquidez para aguantar menos de tres meses en una crisis como la actual.
https://www.expansion.com/empresas/2020/03/19/5e73d1dee5fdea405e8b4595.html