Eso pienso yo también, que el verano está perdido y pasado el verano, vamos a tener cero viajes de empresa (va a ser todo por teleconferencia, videoconferencia, etc) y muy poca gente viajando por ocio.
El riesgo que implica ahora viajar y todas las incertidumbres que rodean a posibles decretos de cuarentena, cierres de fronteras, etc, hacen que no merezca la pena.