No es una noticia magnífica, porque la aerolínea tiene que asumir los sueldos completos de toda la plantilla en un momento en que no hay demanda.
De hecho la poca demanda que había el pasado mes de enero se desplomó por la variante Omicron.
Los pilotos y el personal tendrán que volar para hacer las horas mínimas que se requieren para mantener sus licencias, y la aerolínea vuela para mantener slots... y eso es dinero tirado, a fondo perdido..