El banco suizo Credit Suisse acometerá una "reestructuración radical" de su negocio de banca de inversión, además de una aceleración del ajuste de costes, incluyendo el recorte de unos 2.700 empleos, así como una ampliación de capital de alrededor de 4.000 millones de francos suizos (4.031 millones de euros), después de perder 5.900 millones de francos (5.946 millones de euros) en los nueve primeros meses del año.
"Creemos que no hemos dejado piedra sin remover", ha declarado el presidente del consejo de Credit Suisse, Axel P.Lehmann, al anunciar "una estrategia radical y un plan de ejecución claro" para crear un banco más fuerte, más resiliente y más eficiente.
De este modo, Credit Suisse ha anunciado una "reestructuración radical" del negocio de banca de inversión para transformar su perfil de riesgo con el objetivo de reducir en un 40% los activos de riesgo mediante, incluyendo la venta de una parte significativa de su Grupo de Productos Titularizados (SPG) a un grupo inversor liderado por Apollo Global Management.
Se creará una Unidad de Liberación de Capital (CRU) que comprenderá una unidad no estratégica (NCU) y el negocio de productos titulizados con el propósito de liberar capital a través de la liquidación de negocios no estratégicos, de bajo rendimiento y de mayor riesgo.
Se espera que la NCU libere alrededor del 60% de los activos podenrados de riesgo y un 55% de la exposición de apalancamiento para finales de 2025, lo que le permitirá al banco asignar más capital a negocios de mayor rendimiento donde tiene claras ventajas competitivas.
Asimismo, la actividades de mercados de capitales y consultoría de banca de inversión, tras un periodo de transición, llevarán a la creación de CS First Boston, que en el futuro prevé atraer capital de terceros, así como una asociación preferencial a largo plazo con el nuevo Credit Suisse.
AMPLIACIÓN DE CAPITAL.
Por otro lado, Credit Suisse tiene la intención de reforzar su capital con la captación de unos 4.000 millones de francos suizos a través de la emisión de nuevas acciones para inversores calificados y mediante una oferta de derechos para los accionistas existentes, sujeto a la aprobación de la junta general extraordinaria de accionistas.
En este sentido, el banco Saudi National Bank se ha comprometido a invertir hasta 1.500 millones de francos suizos (1.512 millones de euros) a cambio de una participación de hasta el 9,9% en el banco.
Se espera que estas medidas se traduzcan en una diversificación de la base de accionistas del banco y aumenten el índice CET1 de Credit Suisse del 12,6% en el tercer trimestre de 2022 a un índice pro forma de alrededor del 14%.
El banco estima cargos por reestructuración y deterioros inmobiliarios en conexión con la transformación de 2.900 millones de francos suizos (2.922 millones de euros) hasta 2024. Se pretende que la transformación se financie a través de desinversiones, salidas, acciones de capital anunciadas hoy y recursos existentes.
RECORTE DE PLANTILLA.
Asimismo, Credit Suisse planea reducir su base de costes en un 15%, lo que equivale a unos 2.500 millones de francos (2.519 millones de euros), de los que alrededor de la mitad corresponderán a 2023, limitando la base de costes a unos 14.500 millones de francos (14.613 millones de euros) en 2025.
Credit Suisse, que ya comenzó la implementación de medidas de reducción de costes en la segunda mitad de 2022, llevará a cabo un recorte de 2.700 empleos, el 5% de la plantilla.
De esta manera, Credit Suisse espera operar a finales de 2025 con unos 43.000 empleados a tiempo completo, frente a los 52.000 de finales del tercer trimestre de 2022, lo que refleja las medidas de ajuste de personal y bajas naturales.
RESULTADOS.
Credit Suisse registró pérdidas de 5.900 millones de francos suizos (5.946 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, frente al beneficio neto de 434 millones de francos (437 millones de euros) del mismo periodo del año anterior.
El resultado de Credit Suisse refleja un impacto adverso de 3.700 millones de francos (3.729 millones de euros) por impuestos diferidos relacionado con la revisión estratégica del banco.
La cifra de negocio neta de Credit Suisse hasta septiembre disminuyó un 34,5%, hasta los 11.861 millones de francos suizos (11.954 millones de euros).
El negocio de gestión de patrimonios facturó un 33% menos hasta septiembre, con 3.808 millones de francos (3.838 millones de euros); la banca de inversión ingresó un 50% menos, hasta 4.153 millones de francos (4.185 millones de euros); el negocio de banca suiza mantuvo estable su cifra de negocio en 3.121 millones de francos (3.145 millones de euros); y la división de gestión de activos vio caer sus ingresos un 9%, hasta 1.008 millones de francos (1.016 millones de euros).
Entre julio y septiembre, Credit Suisse registró pérdidas de 4.034 millones de francos suizos (4.065 millones de euros), frente a las ganancias de 434 millones de francos (437 millones de euros), mientras que la cifra de negocio retrocedió un 30%, hasta 3.804 millones de francos (3.834 millones de euros).
La ratio de capital de máxima calidad CET1 de Credit Suisse en el tercer trimestre se situó en el 12,6%, frente al 13,5% del segundo trimestre.
"El tercer trimestre, y más ampliamente lo que va de 2022, se ha visto significativamente afectado por las persistentemente difíciles condiciones macroeconómicas y de mercado, lo que ha llevado a un desempeño más débil para nuestro banco de inversión en particular", declaró Ulrich Körner, consejero delegado de Credit Suisse. "Nuestro desempeño reciente ha sido decepcionante", afirmó