El beneficio neto atribuido de The Coca-Cola Company experimentó un avance del 33,7% en el segundo trimestre de 2023 en comparación con el mismo periodo del año pasado, hasta situarse en 2.547 millones de dólares (2.305 millones de euros), según las cuentas trimestrales publicadas este miércoles por la multinacional de Atlanta, que ha revisado al alza sus expectativas para el conjunto del año.
La facturación de Coca-Cola entre abril y junio alcanzó los 11.972 millones de dólares (10.834 millones de euros), lo que implica un incremento del 5,7% respecto del mismo periodo del año precedente.
Por áreas geográficas, los ingresos en Norteamérica aumentaron un 8% en el segundo trimestre, hasta 4.367 millones de dólares (3.952 millones de euros), mientras que en Latinoamérica crecieron un 21%, hasta 1.378 millones de dólares (1.247 millones de euros); en Europa, Oriente Próximo y África (EMEA) sumaron 2.188 millones de dólares (1.980 millones de euros), en línea con el mismo trimestre de 2022; y en Asia Pacífico un total de 1.567 millones de dólares (1.418 millones de euros), también sin cambios sustanciales.
De su lado, los ingresos procedentes de sus participaciones en embotelladoras cayeron un 2% en el segundo trimestre, hasta 2.042 millones de dólares (1.848 millones de euros).
En datos orgánicos, que excluyen la volatilidad del tipo de cambio y de las variaciones en el perímetro contable de la empresa, las ventas de Coca-Cola en el trimestre crecieron un 11%, incluyendo un aumento del 10% de los precios, particularmente intenso en Europa, Oriente Próximo y África (14%), Latinoamérica (17%) y Norteamérica (9%), mientras que en Asia Pacífico el aumento fue del 5%.
"Me alienta que nuestra estrategia para cualquier escenario, trabajando junto con nuestros socios embotelladores, haya generado sólidos resultados en el segundo trimestre", dijo James Quincey, presidente y consejero delegado de The Coca-Cola Company.
De este modo, en la primera mitad de 2023, la compañía de Atlanta obtuvo un beneficio neto atribuido de 5.654 millones de dólares (5.116 millones de euros), un 20,6% por encima del resultado del primer semestre del año pasado.
La facturación de Coca-Cola entre enero y junio aumentó un 5,2% en cifras absolutas, hasta 22.952 millones de dólares (20.770 millones de euros). En datos orgánicos, los ingresos crecieron un 11%, incluyendo un aumento de los precios del 10% y del 1% de las ventas.
"La solidez de nuestros resultados del primer semestre y la resiliencia de nuestro negocio nos dan la confianza para elevar nuestra guía para 2023", destacó Quincey.
De esta manera, para el conjunto del año, Coca-Cola espera lograr un crecimiento de los ingresos orgánicos del 8% al 9%, frente al anterior rango del 7% al 8%, mientras que sigue confiando en generar un flujo de caja libre de aproximadamente 9.500 millones de dólares (8.597 millones de euros) a través de un flujo de caja de operaciones de aproximadamente 11.400 millones de dólares (10.316 millones de euros), menos unos 1.900 millones de dólares (1.719 millones de euros) en gastos de capital.
Asimismo, la compañía confía en lograr un crecimiento del beneficio por acción, a tipo de cambio neutral, del 9% al 11%, frente a la horquilla precedente de un aumento del 7% al 9%