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Las compañías industriales son las que más están sufriendo este año como consecuencia del parón que se está registrando en la construcción a nivel global, con especial foco en la débil recuperación de China tras la pandemia del Covid -19. Así, ArcelorMittal vio reducido su beneficio en casi un 60%y sus ingresos retrocedieron un 15%. Con respecto al ebitda, el retroceso fue del 51%. Por su parte, Acerinox hizo lo propio y registró unas ganancias de 348 millones de euros frente a los 741 millones de 2022, una caída del 53% en el beneficio que se explica, en parte, por la reducción de la cifra de negocio en casi 2.000 millones. Así, el ebitda se redujo en casi un 49%. En el caso de esta última compañía, a la caída de la demanda se le suman los bajos precios de la división de acería, que se han reducido tanto en Europa -en mínimos históricos- como en Norteamérica, sus principales geografías.
La farmecéutica Grifols, que sufrió la pandemia, tuvo que llevar a cabo un relevante plan de reestructuración que le arrastró hasta los números rojos durante varios trimestres. Si bien ha conseguido volver a números negros, la catalana todavía sale perjudicada en la comparativa interanual, con caídas del beneficio de más del 98% pese a un incremento de la facturación.
Tampoco se libran de las caídas las empresas energéticas, si bien las razones de unas y otras no son equivalentes. Entre ellas destacan Enagás y Endesa, spero tampoco se salvan de las variaciones en rojo otras como Repsol. La compañía gasista ganó un 27%menos hasta septiembre que en los primeros nueve meses de 2022 mientras los ingresos apenas descendieron un 6%. Esto se explica por la ausencia de extraordinarios que contabilizó en el ejercicio anterior. En el caso de la energética que encabeza José Bogas, la caída de las ganancias ha sido del 28% por el impacto de los precios del gas, un incremento de las amortizaciones y provisiones de la compañía y el impuesto extraordinario al sector que le restó 300 millones de euros. Repsol, por su parte, consiguió uno de los beneficios más elevados de su historia, pero se quedó un 14% por detrás de 2022.
Párrafo aparte merece Merlin Properties, la socimi que encabeza Ismael Clemente y que dedica su actividad a las oficinas y las superficies comerciales. Sea como fuere, el descenso en sus ganacias no se debe a una menor actividad de la compañía –de hecho, incrementó sus ingresos–, sino que responde al impacto que tiene en su cuenta de resultados el ajuste en la valoración de los activos.
Mejoran beneficio
Entre las que mejoran su beneficio destacan las turísticas, con IAG, Aena, Amadeus y Meliá a la cabeza, con cifras tanto de ingresos como de beneficios y ebitda que crecen en su totalidad a doble dígito. Y es que el auge de los viajes tras la pandemia está dando alegrías a un sector que vivió sus peores momentos hace apenas tres años.
También destacan por sus buenas cifras, los bancos, que han conseguido elevar sus cifras de beneficio apoyados en la subida de tipos de interés y pese a la contracción del crédito, su principal negocio.
Deuda estable
Con estos datos como trasfondo, la deuda de las compañías del Ibex35 se mantiene prácticamente estable en niveles de algo más de 168.000 millones. Especialmente relevante ha sido el cambio de compañías como Rovi, que han pasado de tener caja neta a endeudarse;u otras como Solaria (+43%) o ACS (+105%), que justifican el aumento por inversiones como la de Hochtief en el caso de la constructora de Florentino Pérez. En el lado contrario, ha habido reducciones como las de Repsol (-15%) o Amadeus (-11%).
Fuente: eleconomista.es
Un saludo!
Mañana sabré explicar lo que ocurrió hoy