Las Autoridades Europeas de Supervisión del sistema financiero (EBA, ESMA e EIOPA) han emitido un comunicado en el que advierten de que los criptoactivos no son adecuados como inversión ni como medio de pago para la mayoría de consumidores minoristas, al tiempo que alertan de los riesgos que entrañan, incluyendo los derivados de la publicidad engañosa que puede realizarse a través de las redes sociales y por los influencers.
A continuación, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Banco de España y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones han publicado otro comunicado conjunto en el que suscriben el contenido de la advertencia de los supervisores europeos y comparten la valoración de los riesgos que se identifican en la misma, que están en línea con los ya señalados en los comunicados realizados en 2018 y 2021.
En su comunicación, los reguladores financieros europeos alertan de que los consumidores se enfrentan a la posibilidad real de perder todo el dinero invertido si compran estos activos, dado que muchos criptoactivos sufren fluctuaciones de precios repentinas y extremas y tienen un carácter especulativo, ya que su precio a menudo se basa exclusivamente en la demanda de los consumidores.
Asimismo, les instan a estar atentos a los riesgos derivados de la publicidad engañosa, incluyendo la realizada a través de las redes sociales y por los influencers, y a ser "particularmente cautelosos" en lo que se refiere a las promesas de una rentabilidad alta o rápida, especialmente aquellas que parecen "demasiado buenas para ser ciertas".
"Algunos criptoactivos y productos relacionados se anuncian al público de manera agresiva, utilizando material comercial y otra información que puede resultar poco clara, incompleta, inexacta o incluso deliberadamente engañosa. Por ejemplo, la publicidad a través de las redes sociales puede ser muy breve y centrarse únicamente en las posibles ganancias y no en los elevados riesgos. También debes tener cuidado con los influencers en las redes sociales, que normalmente reciben un incentivo financiero para comercializar determinados criptoactivos y productos y servicios relacionados, por lo que sus comunicaciones pueden tener un carácter sesgado", avisan.
Otro de los riesgos que entrañan los criptoactivos derivan de que los productos que ofrecen exposición a ellos son muy complejos y, a veces, tienen características que pueden incrementar la magnitud de las pérdidas si se producen fluctuaciones de precios adversas, por lo que no se consideran adecuados para muchos consumidores.
Los reguladores también han alertado de que existen numerosos criptoactivos falsos y estafas cuyo único objetivo es privar al usuario de su dinero mediante el uso de diferentes técnicas, como el 'phishing'.
Además, varios emisores y proveedores de servicios de criptoactivos han sufrido ciberataques y graves problemas operativos, lo que ha provocado que muchos consumidores hayan perdido sus criptoactivos o hayan sufrido pérdidas por este tipo de ataques e interrupciones del servicio o por haber perdido las claves privadas con las que acceden a sus activos.
NO HAY TRANSPARENCIA EN PRECIOS NI MECANISMOS PARA PODER RECLAMAR
Por otro lado, los supervisores europeos han advertido del riesgo por falta de transparencia de precios, manipulación del mercado y escasa liquidez. "La determinación de los precios de los criptoactivos y la ejecución de transacciones en las plataformas frecuentemente no se realizan de forma transparente. Además, la posesión de determinados criptoactivos está muy concentrada, lo que puede afectar a los precios o a la liquidez. Por lo tanto, es posible que no obtengas un precio o trato justo al comprar o vender criptoactivos, o que no puedas vender tus criptoactivos con la rapidez que desearías en ausencia de un posible comprador. Se han notificado casos de manipulación del mercado en múltiples ocasiones", han asegurado.
Los reguladores han avisado a los consumidores de la falta de procedimientos para poder reclamar, así como de la ausencia de protección, ya que los criptoactivos y los productos y servicios relacionados con ellos, en general, quedan fuera de la protección que ofrecen las normas vigentes en la Unión Europea sobre servicios financieros.
"La mayoría de los criptoactivos y la venta de productos o servicios relacionados no están regulados en la UE. En estos casos, no disfrutarás de los derechos y las medidas de protección disponibles para los consumidores de servicios financieros regulados, tales como los mecanismos de denuncia o recurso", han advertido en su comunicado.
LOS SUPERVISORES ESPAÑOLES NO PUEDEN CONTENER ESTOS RIESGOS
En cuanto a los supervisores españoles, recuerdan que la CNMV ha aprobado una Circular que regula las campañas de publicidad relativa a la inversión en criptoactivos, mientras que el Banco de España ha puesto en funcionamiento un registro en el que deben inscribirse quienes ofrezcan en España determinados servicios (cambio de criptomonedas por moneda de curso legal y custodios de monederos digitales), que deberán disponer de medidas y procedimientos adecuados en materia de prevención de blanqueo de capitales y financiación del terrorismo.
El Banco de España y la CNMV han recordado que estos desarrollos legales "solo cubren una parte muy limitada de la actividad sobre criptoactivos, por lo que resultan insuficientes para contener adecuadamente los riesgos que se señalan en el comunicado de las autoridades europeas, que siguen siendo plenamente relevantes"