Feliz domingo a todos.
Me paso por aquí, sorprendiéndome de la "transformación del anterior toro naïf de Karli en toro 'serio'", para deciros que sigo ojeando (de ojo; si fuera de 'hoja', sería 'hojeando') estas páginas de vez en cuando.
Por mi parte, tengo poco que decir; estoy a cinco días de cerrar mi "ejercicio" financiero y puedo afirmar con alivio que hemos tenido superávit. No es poco, cuando se tiene una vivienda en la que refugiarse, unos alimentos que llevarse a la boca, y unos magros ahorrillos en el banco "que a toda costa quiere ser mi banco, los muy jodíos".
Mis hijos siguen creciendo, intelectual y físicamente, a ojos vista, como si fueran una especie de milagro diario. No puedo dejar de asombrarme, mientras contemplo una foto en la que aparezco con cada uno de ellos, cuando eran muy, muy "peques". Yo, apenas he cambiado. Ellos, van conformando, poco a poco, el adulto que llegarán a ser. Un adulto del que yo, esté donde esté para entonces, me sentiré muy orgulloso, con total seguridad.
Nuestra vida, quizá monótona, quizá segura, está, sin embargo, llena de grandes sorpresas diarias; de regañinas tontas, de sentimientos, de incertidumbres y elucubraciones sobre el futuro. Pero es evidente que nos merece la pena vivirla; siempre juntos, unidos, con amor y pequeñas amarguras, si aparecen. Y qué decir de mi "niña", que me acompaña en esta "aventura" desde hace unos cuantos años. Pues que no sabría entender mi vida, nuestra vida, sin ella. Y que doy gracias a quien sea, por tenerla a mi lado todos los días. Aunque probablemente ella jamás lea estas líneas...
Postdata : me he levantado sentimentaloide, pero es que soy así desde que me parieron.
Lo dicho, saludos cordiales y un abrazo para todos.