¡Buenos y felices días!
Pues ya me gustaría saber qué mensajes han sido, más que nada por saber qué es lo que te ha hecho cambiar de opinión respecto al aguilucho, antes vaca, antes toro... Que no es tan malo como lo suelen pintar... ;-)
Te puedo asegurar que no me has "tratado muy mal". Si tú supieras lo que me llegaron a llamar cuando entré al foro a relatar la estafa que hicieron a mi padre los del Stafander, -presuntamenteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee-, te caes redondo. Y ya ves, pocha, pero sigo vivita y coleando y espero que por mucho tiempo.
En cuanto a mis "particulares circunstancias", pues son como las de cualquier bicho viviente. Un día aciago, tienes un accidente y todo lo rosa se vuelve gris, te cambia la vida en un milisegundo y te replanteas qué es lo verdaderamente importante en esta vida.
Yo sigo pensando, lo pensaba también antes del accidente -no ha sido mi primera experiencia muy desagradable y ya tuve tiempo antaño de recapacitar-, que lo esencial es ser feliz e intentar hacer felices a los demás, te rodeen física o virtualmente. De ahí que en el Off Topic rankiano siempre me despida con la frase "¡Sed felices!". Si queremos que cambie el mundo, empecemos nosotros por cambiar nuestro pequeño mundo.
En ocasiones, la felicidad es puñetera, parece que se esconde, pero hay que luchar diariamente por conseguirla y si eres creyente, yo lo soy, pensar que estamos de paso por un Valle de Lágrimas y que está en nosotros el reconvertirlo en un paso agradable para los demás... o no.
La menda nunca perdona, pero no por soberbia u orgullo, no, ¡faltaría más! Simplemente, no me siento capacitada para hacerlo porque no soy quien para perdonar a nadie. Ojalá algún día Dios en su infinita misericordia perdone las muchas faltas que he cometido -y sigo cometiendo- por el angosto camino que, espero me lleve a él. Lo que sí hago es olvidar con cierta facilidad. Te aseguro que hay más de un forero que no me habla y te prometo que no recuerdo por qué discutimos o por qué se enconó la situación.
También es cierto que dos no hablan si uno no quiere y hace tiempo que opté por no contestar a quien demuestra entrar directa y fríamente a meterse conmigo sin más. Entiendo y disfruto con la polémica, me gusta discutir en la acepción de poner sobre la mesa las distintas opiniones sobre un tema, debatirlo, desmenuzarlo y quizá ni convencer ni ser convencido, pero hablarlo inteligente y educadamente.
Para mi gusto, todo lo demás es bla bla bla y de eso hay demasiado por los foros. Es bueno ir seleccionando a tus interlocutores.
Un saludo cordial
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.