Pues mira, no, no creo que tengamos la misma opinión al respecto.
Estoy segura de que, por el instinto de supervivencia, el feto no pediría que lo despedazasen y dejasen sus sanguinolentos trocitos en la mesa de operaciones. Esto me parece de lógica humana... Incluso animal, que los bichos también tienen instinto de supervivencia, tú o yo. Bueno, pues va a ser que yo.
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O igual el feto eligiría que lo matasen con ácido o lo cortasen con el bisturí o lo sacasen a un ambiente hostil, dónde no pudiera seguir con su proceso natural de desarrollo embrionario, vaya usted a saber, ¿?
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Yo no estoy en su pellejo (el del embrión). Ni creo ni dejo de creer la opinión que tendríamos si un ser humano tomase la decisión de acabar con su vida.
De hecho, tampoco nos ponemos de acuerdo con la eutanasia. Y bien mayorcitos que son algunos de los que decidirían acabar con su vida y la ley no les deja.
Quizá porque un ser humano, ya fuera de su mamá, es libre. (Como creyente pienso que la libertad viene de Dios, pero como ya sé que el tema escuece, no lo voy a sacar a colación, porque entre otras cosas, no me hace falta para tener las ideas clarísimas al respecto).
Y como es libre, pues nos cuesta tomar partido en lo que debería o no de hacer. ¿Matarse o no matarse? Jo*er, que es para siempre... Que de la muerte (terrenal) no se vuelve...
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¿Qué ocurre pues con la libertad de decisión de embrión, del desarrollo y aplicación de sus derechos? ¿No los tiene? Y si no los tiene, ¿por qué no se los damos? Si hoy en día somos capaces de legislar todo...
Si su información genética es diferente a la de padre y madre, ¿quiénes somos nosotros para sacarle del ámbito dónde puede desarrollar su proceso natural?
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Es que me planteo que si me mandan a la Luna sin oxígeno, también me matan... Fuera del hábitat natural dónde la vida no es posible, uno va y se muere...
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¿¿¿Perdona??? ¿Cómo que cuando se produce el parto desaparece la controversia?
Muchas piensan que se le puede abandonar, tirar en un contenedor, arrojar por el balcón, atizar palizas hasta la muerte, vender como fuente de órganos de transplante, vender como prostituta para pederastas -sí, de bebés-, escalofriante para mí, negociete para otras, etc. ¡¡Vaya que si hay controversia!!
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Sigo pensando que alguien que interrumpe un proceso vital, dentro o fuera de la madre, comete un asesinato. Vamos, que mata.
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No estoy de acuerdo con tu planteamiento. Casuística hay mil y una más, lo que habría que hacer es sentar las bases de lo que es vida y creo que ahí solo pueden hablar los científicos, porque los políticos y los legisladores, sí o sí, barrerán para casa, como demuestran cada vez que hablan.
Con la ciencia en la mano, en el momento en que veo en el microscopio claramente procesos meióticos y mitóticos, veo vida.
Lo que digan abogados y políticos al respecto, me resulta indiferente.
También te digo que la primera vez que una mujer dé a luz un pimiento morrón, vendré y me declararé abiertamente proaborto.
Un saludo cordial
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.