Yo tengo muchas manías, Juan, pero no las descargo sobre los demás.
Si hay alguien que defiende en este foro el buen uso del castellano (o de cualquier otro idioma), soy yo, pero no se me ocurre señalar a aquellos que son menos diestros que yo en el manejo del lenguaje ..., a no ser que mi contertulio tenga la desfachatez de emplear como arma arrojadiza la falta de respeto, el dicterio y las alusiones personales, pues en ese caso soy capaz de despellejar vivo al oponente y exhibir en público escarnio su abominable desnudez mental, personal y moral, así como cada una de las carencias lingüísticas de las que cojee.
La doble imposibilidad es una obviedad.
Pero no sigamos por este camino empedrado de las discusiones irrelevantes y superficiales para no correr el riesgo de enfangarnos en las ciénagas de las alusiones personales, que para eso tenemos gran hermano 129 y cualquiera de los programas de la bilis y el estómago (perdón, del corazón).
Saludos obvios y maniáticos.