Oleada de dimisiones en Caja Madrid por el escándalo de las tarjetas opacas. A lo largo de este viernes ha dejado su cargo el secretario general de UGT-Madrid, José Ricardo Martínez, y el socialista Ángel Gómez del Pulgar ha abandonado la Ejecutiva del PSM.
Ricardo Martínez ha dimitido a consecuencia del informe de Bankia que revela que gastó algo más de 44.000 euros con la tarjeta que tenía de Caja Madrid por su condición de consejero de la entidad. En Mérida, donde asiste a unas jornadas, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha anunciado este viernes la dimisión de Martínez y ha explicado que a última hora del día de ayer él la aceptó, después de que el líder sindical madrileño le comunicara que hacía firme su decisión de dimitir.
Méndez ha precisado que esta dimisión responde, tal y como ha expresado José Ricardo Martínez, al hecho de que "hay una dimensión legal que tendrán que dilucidar los jueces, pero en un responsable político hay una dimensión ética a la que hay que hacer frente".
A preguntas de los periodistas sobre si los otros consejeros de la entidad madrileña tendrían que seguir los pasos de Martínez en sus respectivos cargos públicos, Méndez ha dicho que no quiere "enseñar caminos" ni "dar lecciones a nadie".
Por su parte, el socialista Ángel Gómez del Pulgar ha abandonado la Ejecutiva del PSM por gastar 147.700 euros en el caso de las tarjetas "opacas" de Caja Madrid, según han informado fuentes del partido. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, abrirá un expediente informativo para estudiar cada caso.
Desde el PSM recuerdan que por el "interés ciudadano" y para ayudar a esclarecer el caso "cuanto antes", los socialistas madrileños se personarán en la causa abierta en la Audiencia Nacional como acusación, tal y como ayer adelantaba el secretario madrileño, Tomás Gómez, en la Asamblea de Madrid.
El primero en caer por el escándalo en Caja Madrid fue el director general de Economía de Madrid, Pablo Abejas, Este jueves el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ordenó su destitución por cargar a las tarjetas opacas de la entidad 246.700 euros desde 2006 a 2012.
A él se sumaba ayer por la tarde, la presidenta de la Fundación Caja Madrid, Carmen Cafranga, que había hecho uso de su tarjeta por 175.200 euros. Cafranga, que en 2003 entró en la comisión de control de la caja en representación de la Fundación y en 2010 ascendió al consejo de administración, justificó su dimisión como una forma de «preservar los intereses» de la Fundación Caja Madrid a la vista de los hechos desvelados.