No se trata de lo que yo crea, si no soy más que "un mindundi" (minuto 1:20), vamos a ver, supongamos que en una empresa un cliente nos debe un 180% de la facturación de un año, y no solo no crece su facturación, o si lo hace es a ritmos del 2 - 3%, que ha recortado todos los gastos posibles, aunque siempre es posible recortar más, queda lo que queda, y exigimos que nos pague, pero no contentos con ello, el interés de esta deuda es del 8%, cuando a otros clientes o no les cobramos intereses o son solo el 1,5 ó 2% ..... es igual lo que deseemos, simplemente por más ganas, empeño y perseverancia en reclamar nosotros, y en pagar ellos, no tienen manera de pagarnos ..... pues nada dejamos de venderles (en este caso sería prestarles) .... vale, el tema es que así tampoco vamos a cobrar ¿Y si les embargamos el Partenon, y todas las joyas y reliquias históricas que tienen? primero ¿de que nos valen? y segundo, seguirá estando ahí, en Dresde hay muchas cosas, pero no El Partenon, ni está ni se le espera .....
Entonces podemos hacer dos cosas, una es hacer "trampas al solitario", y renovar la deuda, volver a refinanciarla, y luego reordenarla ... lo que queramos, el hecho es que en un papel será deuda cobrable, porque no ha vencido todavía, aunque la realidad va a ser otra, y es que no la vamos a cobrar, al menos en su totalidad.
La otra opción es reconocer el problema, donar lo que nos guste o no, tarde o temprano no vamos a cobrar, y situar "los números" en un lugar que si puedan liquidar, podemos quedar rojos y pasar "a la cuenta de los perdidos" lo que corresponda ahora, o hacerlo más tarde, el inconveniente de la tardanza, es que si hoy son, pongamos 70.000 millones de euros (no tengo ni idea de que parte es impagabe, ni cual es el nominal de la misma), dentro de 3, 4, 5 años, no serán 70, serán esos mismo 70, más los intereses que hubiera generado, y que hemos considerado como cobrables, con lo cual tardar va a ser peor, al menos en cuanto a la cifra.