Sabéis que hacen en la capital de la comarca de la Garrotxa, que el Olot, ciudad que mucha gente conoce lamentablemente por el secuestro de la Sra. Maria Angels Feliu (la farmacéutica, bueno ……. a una de las farmacéuticas de la localidad, porque con algo más de 30.000 habitantes, hay bastantes más farmacias que la de la Sra. Feliu).
Bueno que me enrollo, lo que decía en la capital de comarca que me refiero existe la plaza de toros más antigua de Catalunya , y allí llevan años en polémicas pro toros y anti toros, y os puedo asegurar que siempre al margen de creencias políticas, incluso en el propio consistorio municipal entre los mismos grupos políticos hay de todo, otra cosa es que por disciplina de voto se haga una cosa y otra, una pena la verdad mezclar las dos cosas, bien ….. pues una de las peñas animadoras de las fiestas locales sustituyó el corre bou con el “encierru de marrans”, la primera palabra responde a una mala catalanización de lo que serian los encierros por San Fermín
Esta es la web de la peña o agrupación http://www.aoapix.org/index.php?option=com_content&view=article&id=308:els-marrans&catid=67:farandula&Itemid=169
Un “marrà” es el macho de la oveja, que como sabéis suelen ser unos ejemplares grandes con unos cuernos prominentes, bien …. Pues para sustituir un encierro de vaquillas que se habían intentado hace ya bastantes años en la población y con un éxito bastante raquítico, todo sea dicho de paso, construyeron una cabeza de cartón piedra (creo) con cabezas de machos ovinos (ver la web de AOAPIX) con un par de ruedas, y unos tipos empujado a toda leche, que si te cogen, las magulladuras y los morados están garantizados en el cuerpo del “pillado”, esto discurre por las mas o menos estrechas calles del casco antiguo de Olot, en las semana de fiestas de Nuestra Señora del Tura, que está al caer (sobre los días 7 al 11 de septiembre de cada año), porque el día 8 es la festividad de la patrona de Olot.
Esto de las tradiciones hay que respetarlas, pero a la vez tienen que acomodarse a los tiempos, de no ser así el coliseo romano seguiría vivo, bueno ahora me ha pasado un poco, la verdad, pero supongo que se me entiende.
Y no me cansaré de repetirlo este no es un problema político, es un tema de sensibilidades ciudadanas, otra cosa es que para variar los políticos las hagan suyas para obtener vete a saber qué ventajas.