Los bonos los queremos por su descorrelación, si no no tienen sentido en la cartera. Bastaría son invertir menos en renta variable o invertir en low beta.
En esa misma gráfica se ve que la cartera 100% RV siempre bate a las combinadas en plazos de diez años (la roja línea no vale, es de cuatro años). En el fondo es curioso. Si a cualquiera de nosotros nos dijeran que mañana vamos a entrar en coma y no despertaremos hasta dentro de 20 años, todos meteríamos el 100% de nuestro dinero en un índice global de RV (yo, al menos, sin ninguna duda). Habría que pensar por qué lo hacemos diferente despiertos si de verdad nos creemos que no vamos a tocar el dinero en esos 20 años.
Para mí el mejor argumento a favor de bajar la volatilidad de una cartera a costa de sacrificar rentabilidad potencial lo leí el otro día en un libro, en este caso defendiendo el factor low vol: con carteras menos volátiles resistimos mejor las caídas, no cedemos a la tentación de hacer timing y al final mantenemos mayor exposición que en el fondo es lo que te da la rentabilidad a largo plazo: el riesgo asumido. Es decir, a pesar de tener en cartera un menor potencial teórico podemos acabar logrando una mayor rentabilidad real.
De todas formas insisto en que lo que me preocupa de la situación actual de la RF es lo absolutamente intervenido que está el mercado, que de hecho difícilmente se puede considerar un mercado. Además se da la paradoja de que el BCE no está comprando deuda a tipos negativos porque prevea deflación, sino precisamente para tratar de evitarla. Con lo cual está comprando masivamente un activo para lograr que baje de precio, un absurdo económico.
Saludos.