De lo que más me estoy convenciendo en estos tiempos es que parece que estar en liquidez es un desastre, un coste de oportunidad enorme. Que sí, que todo está caro, que hay que ser prudente, pero, vaya, últimamente sube todo: los índices, el growth, el quality, el value, las mmpp, el IBEX, todo.
Y estar fuera esperando es hacer el canelo. Hay dinero por trillones entrando en RV, saliendo de unos bonos por los que nadie paga nada, el euribor muerto para una década, tipos negativos por doquier y una inundación absolutamente bestial de liquidez de los bancos centrales dopándolo todo de una manera nunca vista.
Y nada digo de lo que puede pasar si al final la vacuna funciona y el COVID es historia en pocos meses. Y Biden aprueba más y más planes de estímulo y que no dejarán que se le caiga el chiringo nada más entrar. En fin, el estallido al alza que puede dar todo puede ser memorable.
Vaya, no se sabe, pero o esto termina de la peor manera nunca vista o las reglas del juego han cambiado para siempre.
Casi te diría, Rasta, que da igual un fondo que otro, que esto se ha vuelto loco todo. Pero a mí me pasa como a ti, cuando me subo a una tendencia, siempre subo tarde.