A principios de año deberían empezar a verse.
Antes del 23 de noviembre tienen que devolver al BCE el exceso de liquidez procedente de las provisiones, regaladas (e incluso pagadas) por el propio BCE en los últimos años. Por esta devolución, paradójicamente, el BCE volverá a pagar el interés actual de facilidad de depósito, con los que los bancos españoles (mayoritariamente los del IBEX) recibirán un ingreso/regalo extraordinario; a cambio, estos bancos perderán facilidad de concesión de crédito, y ahí es cuando deberían empezar a mirar hacia el dinero particular, con un diferencial sobre ese interés de facilidad de depósito, que va a dar bastante margen sobre el 1%.
Si sumamos la rentabilidad creciente de los bonos a plazos cortos, yo sí espero depósitos al 1% a principios de año en los grandes bancos, y oportunidades cercanas al 2,5% en otras entidades, cualquier otro escenario haría que viera con mejores ojos el famoso impuesto a la banca.