Y vayamos aún más allá, Feinmann.
Si se confirma un derrumbe de la intención de voto de populares y socialistas, con el consiguiente aumento significativo de upyd e iu, la fragmentación de las fuerzas sería total, con lo que el peso específico de opciones nacionalistas-independentistas-pro terroristas, se multiplicaría exponencialmente, pues el electorado de estas últimas apenas se vería afectado y consecuentemente la situación en España se volvería ingobernable, agravando más (si es posible) la crisis económico-política-social-ética.
Si Europa nos presta dinerito a regañadientes con un gobierno de mayoría más que absoluta, no creo que nos dejaran ni un céntimo con un desgobierno fragmentado.
Saludos.