Para mi hay 2 líneas rojas absolutamente innegociables en este asunto.
1- Si se "rompe" España, Cataluña también se tiene que romper. Nada de ese argumento típico independentista de que "España es divisible pero Cataluña no". Si hay referendúm y todo eso, donde gane el sí, que se independicen, pero donde gane el no eso sigue siendo España, aunque la hipotética frontera hispano-catalana se pareciera a la palestino-israelí, con asentamientos rodeados totalmente por otros del otro país. Al fin y al cabo, si el lema es que no se puede obligar a seguir siendo español a quien no quiere, tampoco se puede obligar a independizarse al que no quiere. ¿O es que siempre tenemos que hacer lo que nos diga el Junqueras de turno?
2- Nada de independencias a la carta. Eso de ninguna manera. Nada de dobles nacionalidades (ser español para lo que conviene), ni barças en la liga española, ni que los secesionistas no tengan ejército ni diplomacia porque hipotéticamente España les cubriera, ni por supuesto ponerles la alfombra roja en el ámbito internacional (UE, OTAN...). Si se van es para todo, y todo es TODO, con sus ventajas e inconvenientes, que veo a mucho que se cree que con la independencia les va tocar la lotería.