En el frente económico de esta especie de guerra no declarada, el culo que recibe las patadas de ambos bandos es el tejido socio-económico de las areas metropolitanas. Eso explica, en parte, el porque del voto diferente de las areas metropolitanas frente a las comarcas.
Eso explica también que los indepes, en el corto plazo, no tengan ningún tipo de estímulo respecto del daño económico, ya que los palos no los reciben ni sus votantes ni sus territorios, sino los "colonizados". A más daño socio-económico cause este enfrentamiento, mientras transcurra de la manera en que está sucediendo, más dañada queda la "cabeza de puente" españolista en Catalunya.
También actúa, en parte, lo que el sector menestral de la derecha catalana ve como una traición de los "Sres. del dinero" (el alto patriciado barcelonino), que han abandonado su habitual complicidad y alianza con lo que un dia fue CiU (y un poquito PSC), y se han pasado con armas y pertrechos tras la "pija de Jerez" y la neo-derecha de C's..
Por otra parte, los evidentes indicios de daño económico que se están produciendo ya en el presente no invitan a un sosiego de posturas extremistas indepes, ya que se confía (quizás excesivamente), en una rápida capacidad de recuperación en el futuro, una vez concluya el conflicto. Pero esta vez ya no junto con empresas "españolas" (traidoras), sino a partir del propio tejido empresarial y nuevas empresas extranjeras deseosas de posicionarse en un mercado grande y de elevado poder adquisitivo.
Puede ser un posicionamiento irracional e irreal, pero el conflicto está muy enconado en lo simbólico y emocional.
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!