Page también rechaza los indultos de Sánchez: «Serán uno de los graves errores de la democracia»
Los indultos que Pedro Sánchez quiere conceder a los golpistas del 1-O están provocando toda una crisis política tanto fuera como dentro del propio PSOE. Ya son varias las voces que han clamado contra la medida de gracia. Especialmente duro se ha mostrado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Page rechaza de pleno que el Gobierno indulte a unas personas condenadas por sedición y malversación de caudales públicos que no se arrepientes de sus delitos cometidos. El presidente de Castilla-La Mancha le ha recordado al presidente Sánchez que la sentencia de Gürtel que sirvió para que el PSOE ganara la moción de censura que le dio el Gobierno es igual de legítima que el pronunciamiento condenatorio del Tribunal Supremo contra los encausados independentistas.
A preguntas de los medios tras recibir la vacuna contra el coronavirus, ha dicho en todo caso que esa decisión aún no está tomada, pero desea «de todo corazón» y desde sus convicciones «constitucionales y socialistas» que no se lleve a efecto.
«Más que una medida de gracia, me parecería una enorme desgracia, sinceramente. Hay muchos argumentos jurídicos y políticos para pensar que la hipótesis de un indulto sea uno de los graves errores de la democracia en el caso de que se produzca», ha abundado García-Page.
«Me duele como jurista que se esté hablando permanentemente de una figura como el indulto desde un perfil político», ha dicho, ya que este mecanismo «no deben tener ni perseguir origen político», ha argumentado.
El razonamiento del Tribunal Supremo está «muy puesto en razón» para García-Page, quien lo ha valorado incluso como «moderado».
«Los indultos no deben tener perfil político, y menos aún que resulten parecer una transacción. En ningún caso pueden significar una cesión, porque eso es exactamente lo contrario de una medida de gracia que a mí no me hace ninguna gracia, esa es la realidad», ha abundado.
Para García-Page, «las decisiones judiciales, en un Estado de Derecho, pueden ser entendidas o no», y aunque comparte la tesis de que tendría que haber habido antes una solución política y no judicial, «los culpables del lío son los independentistas que provocaron a conciencia una crisis constitucional y vulneraron las leyes a sabiendas de lo que hacían».
Por ello, «desde que se vulnera la legalidad, el Estado que se considere de Derecho tiene que protegerla con decisiones judiciales» que además «han salido adelante con el refuerzo de la Fiscalía y sin controversia judicial».
Para García-Page era «evidente» lo que iba a pasar, «la culpa no la pueden tener las sentencias judiciales». Incluso, ha recordado que el último gran cambio político en España vino de una moción de censura tras una decisión judicial que «comportó un giro por completo en el panorama». Por tanto, ha pedido «no entrar en echar responsabilidad a las decisiones judiciales».
Lo «más grave» para García-Page es ahora que «la gente que pervirtió deliberadamente el orden constitucional» y vulneró el derecho de los españoles y catalanes «insisten en reincidir».
«¿Se imagina alguien en qué posición quedaría el que toma la decisión de indultar sin garantizarse primero la renuncia expresa a volver a las andadas?», se ha preguntado García-Page.
En este momento, «una decisión de indulto no ayudaría en el fondo a enfocar el problema de Cataluña», incluso podría ser «estéril», porque podría incurrirse en «la muestra de cómo pueden volver a las andadas sin consecuencias».
«Yo soy del PSOE y mi bandera es la misma que la de todos. Lo último que querría es que el indulto injustificado de alguien que quiere hacer lo mismo sea una condena para la organización de quien sustenta a quien toma la decisión», ha sentenciado el líder del Ejecutivo autonómico.
Aún así, cree que todavía «se está a tiempo», por lo que ha pedido un «replanteamiento», ya que este indulto sólo puede contemplarse cuando haya una renuncia expresa a volver a intentar una declaración unilateral de independencia.
«Espero que esta hipótesis no se convierta en una realidad. Creo que es lo que piensa la inmensa mayoría del pueblo español, de izquierdas y de derechas», ha abundado.
Ahora, hasta donde le permitan sus capacidades «dialécticas o institucionales», va a llegar su posición al respecto. «Esto llegará a tribunales, en el Supremo, cabe que incluso en el Constitucional. No es algo de hoy para mañana».
Su deseo pasa ahora por no vincular la ruptura con ERC en caso de que no haya indultos con el fin de la legislatura, extremo que ha argumentado recordando cómo Mariano Rajoy estuvo «tres años con el mismo presupuesto».