En teoría, el primer beneficiado de la quita es el contribuyente que tendrá que "apoquinar" menos para tapar el "bujero". En segundo lugar se beneficia obviamente la caja ... por el mismo motivo, porque "se tapa el bujero". Esto es bastante simple: Si yo tengo en el pasivo (lo que debo, para hablar en plata) de mi balance una partida que dice "le debo 100 a Pilar", y al día siguiente y mediante una quita puedo modificar esa partida escribiendo "ahora le debo solo 50 a Pilar" ... Adónde han ido a parar los 50 de diferencia?? Evidentemente si debo menos de lo que debía ... a más beneficios ... o a menos pérdidas (esta es la situación de CX). La diferencia "va a tapar el agujero". Donde la caja debía 100 ... el día después de la quita ... debe 50 y ha restado 50 de sus pérdidas. Las quitas reducen pérdidas ... o lo que es lo mismo ... aumentan el capital de la entidad para absorberlas.
Hay dos grandes "colchones" para absorber pérdidas (cuando las hay) en un banco: El primero (y el que primero recibe) es el capital de los señores accionistas que en su día aportaron dinerito para crear el banco (o para ampliar su capital), y el segundo colchón ... es la deuda en sus diversas modalidades. Después del RD de Agosto, a las preferentes y a la subordinada les han dejado "en primera línea de fuego". Hay que ser un héroe para meterse, después del RD, en preferente o subordinada. Son "carne de cañón". Son los primeros en desembarcar en la playa de Omaha.
Respecto a los "denostados especuladores" ... el juego es bastante transparente: Arriesgan su dinero ... haciendo eso ... especulando. Especulando con que "yo compro deuda en el secundario por 30 -pongamos por caso-, sin poner la pistola en el pecho a nadie ... si la compro, es porque alguien me la vende -por el motivo que sea ... porque necesita el dinero o porque cree que puede verse sometido a una quita peor que el 70%-, y "yo comprador" estoy especulando con que la quita sea "sólo" del 50%". Si mi tesis es correcta, compré por 30 y al cabo de un mes CX me canjeó por 50. En consecuencia, gano 20 en un mes. No me preocupa lo más mínimo el pago de intereses. No hago la operación pensando en los intereses, la hago pensando en la plusvalía del canje. Si me equivoco y el canje en lugar del 50% es del 20% ... como he comprado al 30% ... pierdo 10. Eso es, en definitiva, "especular". Jugar con la incertidumbre. Es legítimo y es transparente.
Ejemplo práctico: A 1 de Octubre se amortizó al 100% la "famosa" emisión de subordinada de CaixaGalicia. Vencía el 1 de Octubre. Pues bien, esa deuda estuvo cotizando a mediados de Septiembre al 85%. Quien compró, apostando a que "la quita no llegará tan temprano", compró por 85 y recibió -al cabo de unas pocas semanas- 100. Quince sobre 85 es una rentabilidad aproximada del 18% en cuestión de semanas (además, cobró también la parte del cupón que le correspondía). Quien vendió, asustado por "igual la quita llega antes del vencimiento", vendió por 85 lo que unas semanas más tarde se pagó a 100. Un "lucro cesante" del 15%.
En el caso de las nacionalizadas, quien compra preferentes o subordinada no va a buscar el cupón (que ya sabe que no cobrará). Va a buscar "compro por 30 y espero que luego propongan un canje por 40". Si eso ocurre ... has ganado 10 sobre 30 ... un 33% de rentabilidad en sólo un mes (es sólo un ejemplo, no tiene porque ser así).
Si sirve de ejemplo, en alguna entidad irlandesa se canjeó al 40% en "cash" o al 60% en convertibles. Quien compra subordinada al 30% está especulando con que "el canje en España no va a ser peor que el de Irlanda". Pero claro ... de eso no se tiene la menor certeza. Si al final le proponen un canje al 25% (que también los hubo), "se pica los dedos". Compró por 30 y se lo canjean por 25 ... Pierde 5 sobre 30, un 16%. Una oportunidad de especular en que puedes ganar un 33% pero puedes perder un 16% es atractiva. Puedes perder 1 ... pero si te sale bien, ganas 2. Ratio 2:1. No hay demasiadas oportunidades con ese ratio.
En cualquier caso, lo que se negocia en el SEND ... "és pela amb cinc". Normalmente se ve algún millar (pocos) de euros, nada más. Son operaciones relativamente pequeñitas. Por eso, en la fijación de precio para el canje, se va a recurrir también a la valoración de expertos. El SEND es poco profundo y poco indicativo. Con 100.000 euros puedes hacer "saltar" la cotización de una emisión hacia arriba o hacia abajo.