Hoy traemos un gráfico para quienes todavía piensan que el valor añadido en una cartera de fondos está en la selección de gestores. Esto pudo tener validez en el pasado y lo tiene todavía en algunas clases de fondos, pero desde luego no en renta variable. Que es donde precisamente se cobran las comisiones de gestión más altas.
Para empezar, un ejemplo: la diferencia entre haber invertido en Estados Unidos o haberlo hecho en Europa en los últimos 10 años ha sido superior al 100% (a favor de los Estados Unidos). El peor fondo norteamericano lo ha hecho mucho mejor que el mejor fondo europeo. Lo que aportó valor fue la decisión de invertir en el activo ganador, en este caso la renta variable norteamericana en lugar de la renta variable europea. Y no hacía falta pagar grandes comisiones de gestión puesto que en esos diez años solo un 11 % de los fondos que invierten en Estados Unidos han superado a sus índices de referencia.
Pero hay otro tipo de selección, menos conocida pero que también aporta más valor que la elección de un determinado gestor: acertar en la elección del estilo de gestión.
Antes de continuar quisiera aclarar que desde un punto de vista ético me parece mucho más respetable la posición de los gestores “de valor” (value) que, en general, tratan de batir a los índices de referencia, y no la de la gran mayoría de entidades que, sobre todo en España, se limitan a seguir al índice y cobrar como si realizaran una gestión activa.
El problema que han tenido los gestores de fondos de valor ha sido el de estar en el sitio equivocado en el momento inadecuado. Los fondos de valor o los fondos de crecimiento no son mejores o peores: son alternativas que funcionan mejor en uno u otro escenario de mercado. Son como los coches: en un camino forestal es mejor cualquier todoterreno que un deportivo, pero en autopista el deportivo no tiene rival.
El de estos años no ha sido el escenario adecuado para los gestores de valor. Unos mercados en los que priman la apuesta por la revolución digital y las fuertes subidas no es el mejor escenario para comprar empresas en función del dividendo o la estricta valoración. La diferencia que puede suponer haber elegido “growth” (línea roja) en lugar de “value” (línea azul) en el mercado norteamericano se aprecia claramente en el gráfico que viene a continuación, donde sobra cualquier comentario. Y son datos y números, no opiniones.
Valor vs Crecimiento desde 2004 en EE.UU.
Pero ojo: no siempre ha sido ni será así. Y eso también se ve en el gráfico. Llevo recomendando el estilo de crecimiento frente al valor durante muchos años, así que no soy “sospechoso” de querer vender fondos “value”, actividad que ha sido muy habitual entre los asesores financieros - porque son gestoras pequeñas, sin red de distribución, que pagan una buena comisión a los asesores no independientes. En Nextep Finance somos asesores independientes, no cobramos comisiones de lo que recomendamos, así que no tenemos ningún tipo de incentivo por vender otra cosa que no sea asesoramiento. Aclarado esto, les diré que, igual que ahora vamos por autopista, algún día iremos por un camino forestal. Y que también habrá apuestas sectoriales que requerirán de gestores capaces de seleccionar valores. Es más: recomendaremos estos fondos como medida de prudencia si el mercado empieza a presentar valoraciones peligrosas (todavía no es el caso). Suelen funcionar mejor que el “growth” cuando cae el mercado.
Mientras tanto, “so far, so good”: en nuestra opinión el “growth” seguirá batiendo al “value” en el corto y medio plazo. Pero debemos estar preparados para el cambio porque, además de en elegir los activos y zonas geográficas adecuadas, el futuro de la rentabilidad en las carteras está y estará en el estilo de gestión.