Re: ¿que son este duo?
Las cuentas anuales de Carbures de 2015, entregadas a la bolsa en la tarde del pasado sábado, reflejan con aún más crudeza que el ejercicio anterior las serias dificultades financieras que atraviesa el grupo industrial con sede en El Puerto de Santa María (Cádiz). La compañía que dirigen Rafael Contreras como presidente ejecutivo y Roberto Rey como consejero delegado multiplicó sus pérdidas consolidadas el año pasado hasta 36,7 millones de euros, un 88% más que los números rojos de 19,3 millones de 2014. Deloitte, el nuevo auditor de la empresa en 2015 tras la crisis vivida con el anterior (PwC) a final de 2014 que llevó a la suspensión de cotización de la empresa en bolsa, expresa por ello en su opinión sobre su labor de auditoría dudas sobre la capacidad de la empresa para seguir funcionando. Reconoce los esfuerzos de la compañía para acceder entre el pasado año y el actual a nueva financiación por 34 millones procedente de dos accionistas (la firma catalana Anangu y el fondo BTC), pero recuerda que la propia empresa asegura necesitar otros 30 millones para seguir operando en el año 2017. Carbures cerró el ejercicio con un fondo de maniobra (diferencia entre el activo y el pasivo) de 5,8 millones (en 2014, ese desfase fue de 9,5 millones). La compañía reconoce en sus cuentas que se vio obligada a refinanciar casi 7 millones de euros de deuda con Bankia y BBVA para extender su pago a este año 2016. También detalla que está renegociando el pago de cantidades pendiente de pago a las administraciones públicas (4,2 millones a cierre de 2015, aunque las propias administraciones le deben 6,5 millones); y también con proveedores, a quienes adeudaba 4,8 millones a cierre del año. Igualmente sigue conversando con los bancos, a los que debía en total 20 millones, para renegociar pagos vencidos (sus principales financiadores son BBVA, Bankia y Sabadell).Concurso de acreedores El grupo, con una plantilla media de 850 empleados en 2015, creció en ventas hasta 65,4 millones (la mitad obtenida en EEUU, China, México y Europa). Pero los vencimientos de pagos, el retraso en la ejecución del plan de negocio y las dificultades para lograr financiación tensionaron su liquidez.
La sociedad, por ello, aprobó en marzo pasado reordenar toda la compañía para recortar costes al tiempo que presentar el concurso de acreedores para su filial catalana TRC, adquirida en 2014. Carbures tiene 25 sociedades en su grupo. No se recoge en las cuentas el impacto de la pérdida de un contrato en China que garantizaba 70 millones en ingresos, y que se ha sustituido por otro por sólo 6 millones.