CaixaBank ha cerrado una colocación de deuda sénior no preferente por importe de 500 millones de libras esterlinas (casi 592 millones de euros) con vencimiento a seis años y opción de amortización al quinto, aprovechando el buen tono del mercado, tras semanas de volatilidad y mercados tensionados, según ha informado este martes.
La demanda ha llegado a superar los 1.500 millones de libras (1.775 millones de euros), lo que ha permitido fijar el precio en 210 puntos básicos sobre el nivel del Tesoro del Reino Unido (UKT), 20 puntos por debajo de los 230 puntos básicos ofrecidos en el anuncio. El cupón ha quedado establecido en el 3,5%.
Los colocadores de la emisión han sido Barclays, BNP Paribas, el propio CaixaBank y HSBC.
Se trata de la segunda emisión de bonos de CaixaBank en 2022, la primera del año en divisa no euro, con la que la entidad reanuda la estrategia de diversificación de sus fuentes de financiación en los mercados de capitales, ampliando así su base inversora. Este bono se suma a las emisiones de libras esterlinas y francos suizos realizadas en mayo y junio de 2021, respectivamente.
CaixaBank ha destacado que, con este nuevo bono, continúa reforzando su posición de pasivos 'bail-inables' y cumpliendo holgadamente con los requerimientos de MREL previsto para el 1 de enero de 2024.
Asimismo, ha apuntado la emisión refleja la intención del banco de seguir construyendo proactivamente un colchón de deuda subordinada 'bailinable' que aumente la protección de acreedores sénior y depositantes.
La deuda sénior no preferente tiene un orden de prelación inferior a la deuda sénior preferente en caso de resolución o concurso, pero superior a la deuda subordinada, y ha sido diseñada por los reguladores para incrementar la solvencia de los bancos y garantizar la existencia de mayores pasivos que absorban pérdidas en caso de resolución de la entidad, ha explicado CaixaBank