Elon Musk hizo famosa su cuenta en la popular red social dando consejos sobre
criptomonedas. Al ser productos muy especulativos, poco o nada regulados, y en algunos casos, con escaso volumen, provocó auténticos terremotos en las cotizaciones.
Quizás el más famoso sea el de dogecoin, cripto que nació de una broma y que está en el "top ten" de las que poseen mayor capitalización. Pero no ha sido la única.
No es la única polémica de su cuenta. Hace escasas fechas incluso llegó a tener un acalorado intercambio de mensajes en Twitter con el máximo responsable -David Beasley- del Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) de la ONU. Éste dijo:
"Enhorabuena a Elon Musk por haber superado a Jeff Bezos como la persona más rica del mundo: ¡con un valor de 221.000 millones de dólares! Elon, para celebrarlo te ofrezco una oportunidad única en la vida: ¡ayúdanos a salvar a 42 millones de personas de la inanición por solo 6.600 millones de dólares! La oferta expira PRONTO... y las vidas también"
Musk dijo que si la ONU es capaz de demostrar que 6.000 millones de dólares (unos 5.200 millones de euros), cerca del 2% de su actual fortuna, pueden ayudar a erradicar el hambre en el mundo, donará ese dinero.
Tesla
El último rally alcista de Tesla provocado por una mezcla entre sus resultados y un acuerdo para vender decenas de miles de sus automóviles a Hertz, han llevado a su compañía a ser la
quinta del mercado con mayor capitalización.
Eso supone que la importancia de lo que puedan hacer las acciones de Tesla, se amplifica hasta el punto de ser, con toda seguridad, corresponsables de los últimos máximos históricos en Wall Street.
En este contexto, y como si se tratara de una broma, lanzó una encuesta en Twitter preguntando si debía o no vender el 10% de sus acciones en la compañía. La encuesta se cerró poco después de las 14:15 horas del domingo en Nueva York. Cerca del 58% de los encuestados apoyaron la idea de la venta.
En 2018, Musk acordó obtener la aprobación de un abogado de Tesla antes de comunicar información material a los inversores como parte de un acuerdo con los reguladores de valores de EE. UU. No es claro si ese funcionario hizo una revisión previa de la encuesta de Twitter de Musk.
Las acciones del fabricante de automóviles se han disparado un 73% este año, hasta los 1.222,09 que cerraron el viernes, lo que supone una valoración de 1,2 billones de dólares. El número de acciones que Musk -su CEO y mayor accionista- podría vender equivale al 80% del volumen medio diario de negociación de Tesla en los últimos tres meses. La cantidad de acciones que podría vender sería aún mayor si se incluyen sus opciones.
La encuesta
La mayoría de unos 3,5 millones de usuarios de Twitter dijeron que apoyarían la venta en una encuesta que Musk lanzó el sábado cuando planteó la idea de vender las acciones.
El caso es que si le da por hacer caso a la encuesta, unos 21.000 millones de dólares en acciones de la compañía automovilística saldrían a la venta en el mercado, lo que puede tener implicaciones muy importantes en la bolsa en general. Aunque lo lógico sería pensar que, incluso si hace caso al resultado, no haga la venta de golpe.
Todo esto contrasta con lo que Musk defendió durante años: que sería el último en vender acciones, y a menudo ha aumentado su posición cuando Tesla ha recaudado dinero de Wall Street para que su participación no se diluya.
Al no repartir dividendos, y como lleva haciendo por ejemplo
Jeff Bezos con Amazon durante años, sería normal que
vendiera algunas acciones para conseguir liquidez, puesto que su fortuna personal está casi toda invertida. Pero vender un 10% de toda su participación podría provocar un terremoto bursátil.