El aspecto técnico del bitcoin y del ethereum se ha afeado notablemente durante el mes de diciembre, hasta el punto de que ni los más alcistas en el largo plazo se atreven a señalar qué puede pasar en el corto plazo. Sin embargo, en el mercado de los criptoactivos se ha instalado la narrativa de que las caídas de las últimas sesiones se deben enteramente a la Reserva Federa de EEUU (Fed), por lo que lo que diga el banco central será clave y marcará el rumbo hasta final de año.
Las divergencias entre los analistas sobre cómo reaccionarán los criptoactivos son notables. Unos piensan que este miércoles se pondrá punto y final a las caídas, ya que se producirá un movimiento "compra en las noticias", diga lo que diga el banco central de EEUU en su decisión de política monetaria. Otros, en cambio, creen que la confirmación por parte de la Fed de que acelerará el 'tapering' y acercará las subidas de tipos al año próximo, prolongará la aguda corrección en los criptoactivos.
El bitcoin, un 33% por debajo de los máximos históricos, lo ha tenido difícil desde el inicio de esta semana, cuando se precipitó hacia 45.670 dólares. Desde entonces, se ha mostrado algo plano, tratando de
encontrar apoyo en torno a los 47.000 dólares, donde "ha hallado una buena línea de flotación durante el último par de semanas, a excepción de la caída repentina de hace 10 días, por lo que este podría ser un
nivel clave para la criptomoneda, ya que busca encontrar su ritmo de nuevo", comenta Craig Erlam, analista de Oanda. El martes recuperó los 48.000 dólares, donde sigue este miércoles.
"Una Reserva Federal flexible podría entusiasmar al criptomercado, pero puede ser mucho pedir dados los niveles de inflación que estamos viendo", agrega el experto.
Los indicadores técnicos juegan a favor de los pesimistas, ya que se intuye en los gráficos la formación un patrón de cabeza y hombros. "Las caídas actuales y la siguiente consolidación podrían completar el hombro derecho, con un cuello en 41.500 dólares y un mayor interés de compra justo en el nivel de 40.000 dólares", señalan en 'CoinTelegraph'.
Los datos que maneja Whalemap, que se define como una cuenta de análisis de transacciones en la cadena de bloques, también señalan el nivel de 40.000 dólares como una zona que hay que vigilar de cerca.
“El problema en el corto plazo es que puede pasar de todo”, indica José María Rodríguez analista técnico de 'Bolsamanía'. Y explica que “tenemos al rey de las criptomonedas en zona de nadie, a medio camino entre el importante soporte de los 40.000-41.500 dólares (los mínimos de septiembre) y lejos ya de la resistencia de los 53.600 dólares y ya no hablemos de los 60.000 dólares”. “En términos de muy corto plazo este tiene un soporte a la vuelta de la esquina en los mínimos de la semana pasada (47.215 dólares) y resistencia en los máximos de la misma (52.195)”, apunta.
Sin embargo, otros observadores del mercado apuntan a que, una vez se conozca el veredicto de la Fed, los operadores se dejarán llevar por las compras en un movimiento "sell the rumor, buy the news" (vende con el rumor, compra con la noticia). Al menos en el corto plazo, con objetivo hacia los 53.000 dólares y una resistencia clara en los 60.000 dólares.
Sin embargo, es complicado apostar a que estas alzas, de producirse, sean más que un rebote tras las caídas, ya que si el banco central estadounidense confirma lo esperado, una subida de tipos y un final más rápido de lo esperado de las políticas de dinero fácil podrían provocar que el mercado se volviera bajista.
EL ETHEREUM, ¿HACIA 3.000 DÓLARES?
En cuanto al resto del sector, se ha vivido una purga en las principales 'altcoins' que ha afectado al ethereum. La criptodivisa número dos alcanzó un máximo histórico en torno a los 4.867 dólares a principios de noviembre, para caer casi un 20% un mes después por el aumento del sentimiento de toma de beneficios.
El período de políticas monetarias laxas después de marzo de 2020 ha sido fundamental para impulsar el precio del ether más de un 3.330%. Por lo tanto, la creciente probabilidad de un acelerón en la reducción de estímulos puede poner en el congelador el actual rally y el mercado alcista en su conjunto, según algunos analistas.
El precio de 3.900 dólares, que ha actuado como soporte durante largo tiempo se erige ahora como la primera resistencia a superar para que vuelvan las subidas. En cambio, de seguir con la ventas, la unidad nativa de la red Ethreum podría caer hasta 3.250 dólares. Otros expertos son aún más pesimistas y apuntan a 2.800 dólares.