La onza de oro troy, activo refugio por antonomasia, ha firmado en la tarde de este martes un nuevo máximo histórico al elevarse un 1,7% y tocar los 2.465 dólares mientras el mercado recupera la idea de que la Reserva Federal (Fed) llevará a cabo varios recortes de los tipos de interés antes de que acabe el año.
Según los datos del mercado consultados por Europa Press, el máximo histórico previo al registrado esta jornada se produjo el pasado 20 de mayo en los 2.450 dólares. En lo que va de año, el oro acumula una revalorización de casi un 20%.
La actual tendencia alcista del metal precioso se inició el pasado jueves -ese día subió casi un 2% y superó el nivel de los 2.400 dólares por primera vez desde finales de mayo- tras publicarse un descenso mayor de lo esperado de la inflación de Estados Unidos en junio, lo que ha dado pie a los inversores a esperar recortes de los tipos de interés más tempranos por parte de la Reserva Federal (Fed).
Al hilo de esto, cabe destacar que ayer el presidente de la Reserva Federal (Fed) de EEUU, Jerome Powell, reconoció "algunos avances" en el frente de la inflación durante el segundo trimestre del año.
"El líder de la autoridad monetaria indicó que existe un mejor equilibrio entre los dos mandatos –la estabilidad de los precios y el pleno empleo–, y que, de ahora en adelante, mirarán por ambos", han comentado los expertos de Banca March al respecto en un informe.
De su lado, los analistas de Renta 4 han valorado esta jornada que el mensaje de Powell, unido al "progresivo enfriamiento", les lleva a descontar dos bajadas de tipos en 2024, "sin descartar que sean tres"; la primera de ellas sería el 18 de septiembre.
Entrando al detalle de la mencionada referencia macroeconómica, el índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos se situó en el 3% interanual en el mes de junio, lo que implicaba una desaceleración de tres décimas respecto al dato de mayo.
El dato de junio podría contribuir a la normalización de la política monetaria por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), ya que apunta a una contención de la inflación, si bien la variable preferida por la Fed para monitorizar el coste de la vida es el índice de precios de gasto de consumo personal (PCE).
Cabe destacar que el oro y el dólar mantienen, según la teoría clásica, una correlación inversa, ya que cuando baja el 'precio del dinero' (los tipos de interés) son necesarios más dólares para comprar lingotes, en tanto que una política monetaria dura presiona el precio del metal.
Con todo, en los últimos meses esta relación se ha visto alterada y ambos activos han convergido al alza: por un lado, el dólar se mantiene fuerte al tener la Fed los tipos de interés en el rango del 5,25-5,5%, mientras que el precio del oro se ha visto impulsado por los riesgos geopolíticos y la demanda de los bancos centrales.
Al hilo de este último punto, Bank of America (BofA) pronosticó a finales del pasado junio que la cotización de la onza de oro troy escalase hasta los 3.000 dólares en un plazo de 12 a 18 meses por la confluencia de varios factores, entre los que sobresalía la demanda del metal precioso por parte de los bancos centrales.
CONTEXTO DEL ORO: SUBE MÁS DE UN 30% DESDE EL ATAQUE DE HAMÁS
La cotización del oro resurgió con fuerza por el regreso a primer plano del conflicto palestino-israelí, en tanto que desde el pasado 7 de octubre -día del ataque de la milicia islamista Hamás sobre territorio israelí- el metal acumula una revalorización de un 34%.
De esta manera, impulsado por los riesgos geopolíticos y la compra masiva por parte de los bancos centrales, el oro alcanzó a principios de diciembre una nueva cota para sus registros históricos por encima de los 2.100 dólares y siguió perforando cotas hasta alcanzar los 2.450 dólares el pasado mayo.
Anteriormente a esa racha alcista del pasado otoño, la última vez que el oro cotizó por encima de los 2.000 dólares fue en mayo de 2023 por la tensión en el conflicto ucranio y los coletazos derivados de la crisis de la banca regional estadounidense, así como la quiebra de Credit Suisse del pasado marzo, de tal manera que su valor alcanzó un valor de 2.063 dólares a principios de mayo.
Con todo, el anterior máximo histórico del oro -previo al de finales de 2023- se produjo el 7 de marzo de 2022, cuando la onza tocó los 2.075 dólares, por el comienzo dos semanas antes de la invasión rusa de Ucrania. A su vez, también rondó esos niveles en agosto de 2020 tras el estallido de la pandemia