Re: Aprovechando el festivo...
Ah, bueno, vale, si es así, de acuerdo. Aparco el tema de las advocaciones.
Pensaba que creías que los que rezamos ante una imagen, idolatrábamos el trozo de madera, plástico, porcelana o el material de la figura, lienzo, foto que representa a la Virgen, Dios o los santos. Que representa, no que es.
Ahí sí que cabe la libre interpretación y la imaginación del autor, por muy desbordante que sea. La obra como objeto de arte, tendrá el mismo valor si se parece o no a la realidad, que por otra parte, tampoco puedes negar a la mayor que el autor no haya visto a la Virgen, como las niñas de Fátima u otras apariciones marianas... Decían que Murillo sí la había visto. De ahí surgiría su obsesión por pintar Inmaculadas y dicen que a él mismo se le antojaban muy diferentes a su visión.
No obstante, me parece más humano pensar que las haría porque España acogió con entusiasmo el edicto de Felipe IV, colocando el reino bajo la protección de la Inmaculada Concepción. https://www.youtube.com/watch?v=Jtx7lNsSPPQ
Teorías hay varias.
Un cuadro no es una foto. Ahí estamos también de acuerdo. Ni lo pretende...
A mi me gusta ver imágenes representativas de la Virgen, ¡me encanta! Con decirte que tengo una colección de imágenes en postales de diferentes advocaciones en los distintos municipios que he ido visitando, te lo digo todo.
Y rezar ante una imagen, me ayuda a concentrarme. Pero insisto, nada más lejos de la idolatría. En todo momento sé que ese trozo de material NO es la Virgen, ni tiene por qué aproximarse a su físico. Realmente, cuando rezo, hablo con el alma y con el corazón, su físico -si era rubia o morena, alta o baja, rellenita o delgada- me resulta tan indiferente, como supongo a Ella le resultará el mío, porque si mira con ojos de Madre, algo que no dudo, mirará directamente al corazón...
También me gusta abrir mi cartera y poder besar la última imagen que besaron mis padres.
No veo que afecte a la fe en ningún grado.
Un abrazo creyente
¡Sed felices!
Edito: Solo un apunte sobre los carboncillos y su fidelidad con el original. En el cuadro que nos pintó un artista (por llamarle de alguna manera) de Salou, mi hermano salía un poco "birojillo", pero se parecía algo. La menda, ¡Dios mío!, qué horror, salía bizca perdida, nunca lo fui, tampoco habría pasado nada por serlo, vamos, pero no lo era, jajaaaa y a mi madre le parecía tan horroroso el cuadro al carboncillo, que lo tenía escondido detrás de un armario, jajaaaa, hasta que un día mi padre lo descubrió y lo colgó en el salón. ¡Ni te imaginas el disgusto de mi madre! XDDDDD. Pero mi padre tenía razón: yo no era así, era solo la imaginación del autor. Si dentro de 100 años el pintor llega a algo (lo dudo), su firma valdrá millones y a mi no me importará tanto salir estrábica en el cuadro, jajaaaaa
P.D.: Tengo mil fotos de Guernica (ahora Gernika) y ninguna se parece en nada al cuadro de Picasso... No se puede ni debe poner freno a la imaginación de un artista.
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.