Suscribo todo lo dicho por el forero Acrasol.
En las universidades muchos viven en una especie de micromundo paralelo, en que no hay casi contacto con la realidad.
A muchos profesores y catedráticos no les vendría mal un año ejerciendo en su área, a pie de calle, en la empresa privada, para luego volver y dar una formación de calidad a sus alumnos.
Y los alumnos, a pasar el rato, al bar, pero no al de la universidad, que en España hay muchos bares.
Cuantas veces salía de la primera clase de la asignatura en la Universidad, y la gente ya resoplando diciendo que nada, que se la dejaban para la siguiente convocatoria, que era un hueso, que tal que cual. Curiosamente yo me iba a casa a preparármela desde el primer día, y jolín, ¡¡que extraño!!, mira que soy corto habitualmente..., ¡¡y aprobaba y todo!!.
Y las becas, a los alumnos excelentes.
Un saludo.