Voy a contaros una historia que sucedió estos días. Para alguno quizá no tenga ninguna importancia pero para mi sí, al menos simbólica.
Con motivo de la presentación de la traducción del libro del Bogle, en la cuenta oficial en Twitter de la Value School, la escuela de inversión de Cobas AM hicieron un sorteo de un libro. Para participar solo había que seguirlos y hacer retweet.
En el sorteo participaron más de 300 personas de lo más variopintas, como si fuesen repartidas al azar entre las aficionadas a la inversión y seguidores de Cobas.
La ganadora del concurso se salía un poco del patrón de persona que participaba en el concurso. “Doctora en CC Información, profesora, y economista experta en marketing en Telefónica. Es mi cuenta personal”, hasta aquí todo normal, también los doctores que necesitan aclarar que es su cuenta personal tienen derecho a participar.
La sorpresa es que esta persona no utilizaba mucho twitter últimamente y siempre que lo hacía era para hablar de algo relacionado con Cobas AM o con la Value School.
La casualidad que ya hizo rebosar el vaso fue que de los escasos 40 perfiles que sigue Cobas AM en Twitter la número 8 en antigüedad era la persona que ganó el libro… mucha casualidad… a lo que puse un comentario diciendo.
Lo más gracioso y que me di cuenta después es que la persona que había ganado el concurso (que no tenía ninguna culpa) ¡¡ni siquiera había participado en el sorteo!!, si entrabas en su perfil no había hecho el retweet con el que se participaba. También se lo comenté.
Al día siguiente me entero de que tras preguntar quién y cómo había hecho el sorteo la cuenta de la Value School me había bloqueado. Lo publico en Twitter y unos cuantos usuarios que habían participado en el sorteo empezaron a pedir explicaciones a la Value School y a Cobas AM.
El bloqueo duró poco, debieron recapacitar y me desbloquearon. Y ahí empezó su explicación de que el sorteo había sido limpio.
La Value School no dijo nada al respecto. La ganadora del sorteo que llevaba meses sin publicar nada que no estuviese relacionado con Cobas publicó de repente tres comentarios sobre otros temas. Después contestó a otros usuarios que no sabía nada de lo que había pasado y que había eliminado el retweet cuando fue a darle a que le había gustado…
Es decir, la ganadora del premio cuando se enteró que había ganado un libro de manos de la escuela que tanto sigue en las redes… en lugar de agradecerlo (como hizo después) por error eliminó el retweet. Poco creíble.
Vamos, una chapuza de la Value School que involucró a esa pobre señora que no tiene otra culpa que la de encubrir la “corruptela” del sorteo entregado a dedo.
Value School y Cobas no son lo mismo aunque compartan edificio y propiedad. El motivo por el que se creó esa escuela fue para difundir el value investing, iba a ser algo así como la obra social del Cobas AM.
Queriéndolo o sin quererlo las contribuciones de la escuela aportarán prestigio a la gestora.
Queriéndolo o sin quererlo el desprestigio de la escuela por acciones como esta mancharán a la gestora cuando sucedan.
Sobre cómo se hizo el sorteo, quién lo hizo, etcétera se sigue sin saber nada. Lo único que tengo claro es que si Value School vuelve a sortear algo… yo no me ilusionaría mucho.