el big pharma evidentemente está para ganar dinero, se meten en el desarrollo de medicamentos en el que tienen expectativas de ganar dinero. Por eso no suelen meterse en vacunas para epidemias que pueden ser estacionales y no está claro que se vayan a quedar, o tampoco en nuevos antibióticos, porque solo se usan en casos extremos, cuando los tradicionales que son más baratos no son efectivos, y el mercado es muy reducido.
El caso de la hepatitis C, lógicamente está pensado para que lo paguen los sistemas públicos y la aseguradoras. La justificación económica es valorar ese precio frente a la alternativa: personas enfermas durante años o de manera crónica, con elevados costes en el tiempo de esos tratamientos que no les acaban de curar, ausencias laborales, o incluso incapacitaciones y pensiones. Y al final los Estados y las aseguradoras lo pagan porque es la mejor alternativa. La justificación moral ya es para cada uno.
Sobre el coronavirus, se trata de un medicamento que Gilead desarrolló contra el ébola, remdesivir, y que llegó a la fase de ensayo en la que se demostró que era seguro administrarlo a los humanos. Pero finalmente no se usó porque apareció otra terapia más eficaz, con lo cual quedó apartado.
Dado que el coronavirus usa un mecanismo similar para replicarse, que es lo que ataca ese medicamento, pues se está con los ensayos para probar su eficacia, teniendo en cuenta que ya tienen avanzadas todas las fases de seguridad en humano que he comentado antes.