Esta noticia ya la había leído la semana pasada no me acuerdo en qué periódico. Al parecer este científico se ha separado del redil (como muchos genios) y no está muy bien visto por el establishment científico francés, pero como bien dices, es un premio Nobel y yo en principio estoy abierto a creerle (no teniendo ni idea del tema).
Siempre he pensado que casi nada es por casualidad. De hecho no creo que hubiese mejor momento para hacer un confinamiento en China que en Enero-Febrero cogiendo 3 semanitas de celebración del año de la rata. Esto unido a que venimos de la trading war entre Donald y el PCC, que en el famoso mercado de Wuhan aparecieron algunos pacientes pero que ni mucho menos eran los primeros y que según Fran de la Jungla el tráfico de pangolines desde Tailandia se frenó en seco desde Octubre de 2019 (que eran las cobayas preferidas de los laboratorios chinos)... pues hombre, da que pensar.
Tampoco me extrañaría que un becario de un superlaboratorio se pusiera a jugar con un pangolín, le mordiera un dedo y marchara para casa callado como un puta para no perder el currelo y desde entonces hasta hoy (esta es una historia sin Putin de por medio y la verdad es que tiene menos gracia...)