Estimado Paneque,
Ciertamente mi formación no es como veterinario; yo estudié biológicas.
Por ello sé que un episodio alérgico no es otra cosa que una respuesta del sistema inmunitario ante una sustancia para la que NO ESTÁ PREPARADO el organismo desde su nacimiento. Es decir, de entre los millones de sustancias químicas que puede entrar en contacto con su sistema inmunitario que está codificado en su ADN (por eso utilizo el término "genético") un cierto organismo resulta ser incapaz de tolerar "de serie" un cierto número de ellas. Estas hacen que el cuerpo dispare todo su arsenal de medidas para defenderse o atacar a esas sustancias que identifica como contaminantes, como agresión.
Las células de nuestro cuerpo son extraordinariamente solidarias y saben sacrificarse por el bien común, así que cuando ese alérgeno entra en contacto con la piel, por ejemplo, pues parte de nuestra bioquímica se enfrenta a él mientras las células contaminadas "mueren" para llevarse con ellas el material tóxico: ahí tenemos, por ejemplo, esa piel escamosa, irritada, etc.
Evidentemente el alérgeno y la respuesta alérgica no son genéticas pero sí lo es la carga que llevamos en nuestro ADN y que hace que una determinada sustancia que no debería causarnos ningún problema sea identificada por nuestro organismo como un "alien": falta la programación para reconocerla y eso, amigo mío, es un problema de fabricación, en términos coloquiales.
¿Qué sucede? Pues que el alérgeno puede presentarse en cualquier momento de nuestra vida o no hacerlo jamás. Una nueva fruta tropical, una fibra sintética, un componente con nanotecnología (de esto hay un fascinante informe del LLOYD's) que nos expone a partículas demasiado pequeñas para que nuestro organismo las controle como ha hecho en los últimos 40.000 años, etc. Todo eso pueden ser agresiones para las que no estamos programados.
Si no lo consideras genético, por favor, díme ¿cómo se codifica y programa nuestra bioquímica?
Para un perrito, igual.
Un bebé celiaco tendrá graves problemas con las papillas que tienen gluten desde el primer minuto pero no presentará ningún problema durante su fase de lactante. Es celiaco desde que estaba en el vientre de su madre aunque no se manifieste el problema hasta que entra en contacto con el gluten. La sintomatología no es el desencadenante sino la manifestación y no puede confundirse en ningún momento con el nacimiento de la (llamémosle) patología. Es como decir que un asesinato se comete cuando es descubierto el cadáver solo porque un minuto antes de descubrirlo le hemos comprado una corbata porque no sabíamos que estaba muerto.
En una conocida aseguradora de seguros médicos (humanos) podemos leer en su capítulo de exclusiones:
"Quedan excluidos del objeto de este seguro los gastos médicos y/u hospitalarios correspondientes a:
a) Toda clase de enfermedades, defectos o deformaciones preexistentes y/o congénitas, a consecuencia de accidentes o enfermedades ocurridos con anterioridad a la fecha de inclusión de cada Asegurado en la póliza; así como los que puedan derivarse de aquéllos.
El Tomador del Seguro, en su nombre y en nombre de los beneficiarios y/o cada uno de éstos, está
obligado a manifestar en el momento de suscribir la propuesta/solicitud de seguro, si padecen o
han padecido cualquier tipo de lesiones o enfermedades, especialmente aquéllas de carácter recurrente, congénitas, o que precisen o hubieran precisado estudios, pruebas diagnósticas o tratamientos de cualquier índole; o en el momento de la suscripción padecieran síntomas o signos que pudieran considerarse como el inicio de alguna patología. Manifestándose de esta forma, la afección se considerará como preexistente y/o congénita y, en consecuencia, excluida de las coberturas pactadas en el contrato de seguro. Si hubiera enfermedades preexistentes y/o congénitas, la Entidad se reserva el derecho de aceptar o rechazar la incorporación del solicitante o solicitantes, y en caso de aceptarlo(s), se incluirá la correspondiente cláusula de exclusión a las condiciones particulares de la póliza en lo que se refiere a la prestación de servicios por enfermedades, defectos o deformaciones preexistentes y/o congénitas, presentes con anterioridad a la fecha de inclusión de cada Asegurado en la póliza; así como los que puedan derivarse de aquéllos"
Como referencia.
Un saludo.