Sinceramente creo que todo habría sido más fácil si la tentativa hubiera tenido éxito, me habría evitado todo el sufrimiento físico y psicológico. Para mi familia habría sido muy doloroso, pero con el paso del tiempo habría sido soportable. Pensaran que soy un egoísta, tal vez sea así. Aunque desde mi punto de vista siempre he sido yo el que se ha esforzado por encajar, en definitiva, por vivir.
Parece que al sistema al sistema le cuesta, joder...
¿El expediente 1614646/21?
¿Funcionario con sólo dos meses de antigüedad? ¿Accidente laboral? ¿Suicidio?
Nada..., al 1614646/21 no le vamos a conceder ninguna incapacidad, está fuera de cupo.
¡Siguiente!
Se peleará la cosa, pero desde un estado de ánimo muy precario, ya tuve mi pequeña crisis de ansiedad tras la primera desaparición del punto 5 (hasta suena un tanto ridículo mientras lo escribo "desaparición del punto"). Nada escandaloso, siempre he sido muy precavido, como esta vez que el metro me pasó por encima, nadie nunca lo vio venir "dicen".
Hoy mi reacción es la de dejarme llevar, no hablo de una tercera y definitiva tentativa (dicen que a la tercera va la vencida). Hablo de algo imposible, lo sé. Encerrarme tanto en mi interior, crear una coraza inexpugnable, vivir sí, pero sólo hacia adentro. Sería un sueño húmedo si se llegara a culminar. Desde siempre he intentado evadirme así, desconectando literalmente de la realidad. Pero siempre acabas regresando, sería perfecto que dejaran al avestruz en paz, allí abajo, en su mundo de fantasía y subsuelo.
Hoy sique siendo un día gris. Como dijo Lluís, desde que pasé por el ICAM la cosa ha ido de mal en peor. Ni tan siquiera creo que sea paradójico, sólo pienso que así es mi vida.
Santi