"El consejo son 500, señalados por la suerte, 50 de cada tribu. Desempeña la pritanía por turno cada una de las tribus, según le toca en suerte, las cuatro primeras cada una treinta seis días, las seis restantes treinta y cinco cada una, pues computan el año por la luna. Los que de éstos son prítanos, primero hacen las comidas en común en la rotonda, recibiendo dinero de la ciudad, después convocan al Consejo y al pueblo; el Consejo todos los días, excepto los que son de vacación, el pueblo cuatro veces en cada período de pritanía. Y éstos anuncian por escrito las cosas que ha de ocuparse el Consejo cada día y dónde tiene que reunirse. También anuncian por escrito el orden de las asambleas, una en primer lugar, la principal, en la que hay que confirmar por votación los magistrados, si les parece que gobiernan bien, y debe tratarse en ella acerca de los víveres y de la defensa del país, y en este día pueden los que lo desean hacer acusaciones de traición, y ha de leerse las cuentas de los bienes confiscados y las herencias vacantes y las hijas herederas, de manera que a nadie le pase desapercibido que algo queda vacante. En la sexta pritanía, además de lo antedicho, conceden votar levantando el brazo sobre el ostracismo, si se resuelve hacer o no, y las acusaciones contra los sicofantas hechas por los atenienses y por los avecindados hasta tres de cada clase, y contra cualquiera que después de hacer una promesa al pueblo no la cumple. Otra se celebra para las suplicaciones, en las cuales el que quiere coloca una suplicación por las cosas que quiere, sean privadas o comunes, y la formula al pueblo. Las otras dos son acerca de las demás cosas, y en ellas las leyes disponen que tres asuntos sean de cosas sagradas, tres para los heraldos y embajadas, tres para cosas profanas, y tratan algunas veces sin votación previa."
(ARISTÓTELES. Constitución de los Atenienses. 43, 2)
Atribuciones
Los pritanos ejercían, junto a la Boulé (el Consejo) y la Ekklesía (la asamblea de ciudadanos), un conjunto de papeles administrativos y religiosos:
* Los pritanos convocaban en sesión a la Boulé para discutir y redactar los probouleumata (προβούλευμα), proposiciones de ley para someter a la Ekklesía.
* Preparaban y organizaban la sesión de la Ekklesía (al menos debe tener lugar una sesión por pritanía):
o Convocaban a los ciudadanos (dispersos por el territorio del Ática).
o Controlaban el acceso a la Pnyx (la colina dedicada al gobierno).
o Supervisaban el desarrollo de los debates.
o En el siglo V a. C., realizaban el recuento de los sufragios (en el siglo IV, este papel finalmente fue atribuido a los proedros, que eran elegidos a suerte entre los miembros de las otras nueve tribus).
* Mantenían el fuego sagrado de la ciudad en el Tholos (ἡ θόλος), una llama que jamás debía apagarse. La vigilancia de este edificio se confiaba cada día a los miembros de una tritia.
Uno de los pritanos, elegido a suerte, ejercía durante un día la función de epístata (ὁ ἐπιστάτης), es decir, presidente del Consejo (en la práctica el jefe del Estado, los arcontes habiendo visto su poder menguado) y Guarda de los sellos (sello de la ciudad, llave del tesoro, llave de los templos). Dirigía los trabajos de la Boulé y presidía la sesión de la Ekklesía. Esta función no era puramente honorífica, puesto que una grafé paranomon (ἡ γραφή παρά νόμων) podía ser interpuesta contra el epístata (véase Boulé).
Quien tiene dinero tiene en su bolsillo a quienes no lo tienen