Estimado Sergi, como no podía ser de otra forma, encantado de saludarte a ti también.
En cuanto a lo que comentas, y ya que ha salido la oportunidad de debatir sobre ello, me gustaría sacar a reseñar algo que normalmente nadie cuenta cuando hablan de que el estado tiene deuda, déficit, etcétera.
Por ejemplo, en 1990, el último tramo del IRPF -el de las rentas más altas- era del 65%. Antes de marchar Felipe, lo bajó hasta el 56%. Después, y ya gobernando Aznar, lo bajó hasta el 45%. Zapatero hizo lo propio y lo bajó al 43% a partir de 2006. 5 años después, lo subía de nuevo al 45%, por eso de intentar que pareciese que los sacrificios eran compartidos.
Consecuentemente, y en función de lo anterior, ¿cómo no va a haber déficit? En 20 años, el último tramo del IRPF ha bajado del 65% al 45%, y el número de tramos ha pasado de los 28 originales a una decena, siendo en algunos años incluso menos: 6.
Si a lo expuesto anteriormente, le sumas lo ya dicho de que el fraude en España es del 24% y en Alemania es del 6%, pues ya no es de extrañar que haya un agujero. No obstante, eso no implica que haya que recortar, porque el agujero no viene de que se haya gastado de más, viene de que la política fiscal en España es un completo desastre.
Un último apunte: “en general, todos los ciudadanos pagan menos impuestos que sus homólogos en la mayoría de países de la UE-15, estas diferencias no son tan acentuadas entre la mayoría de la población (un obrero metalúrgico en España paga en impuestos un 73% de lo que paga su homólogo en Suecia) como en las rentas superiores (un rico en España paga un 48% de lo que paga un sueco rico).”
Me encanta el olor a NVIDIA por la mañana