Endesa ha obtenido un beneficio neto de 832 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un 26% menos que en el mismo periodo del año anterior, debido al fuerte repunte de los precios de las materias primas, especialmente el gas y también del precio medio de los derechos de emisión de CO2.
Y es que la eléctrica liderada por José Bogas se ha visto afectada durante estos seis primeros meses por un contexto de fuerte subida del precio de la electricidad. Al principio del año debido a la borrasca Filomena y posteriormente se han registrado picos en el mercado mayorista de forma que los precios han llegado duplicarse, en promedio, respecto al primer semestre de 2020. Endesa vende más energía de la que produce y por ello necesita comprar electricidad en el mercado, de manera que se beneficia cuando los precios caen, pero se ve perjudicada si están altos como ha ocurrido durante esta primera mitad del año.
“La coyuntura del mercado energético en España, con el fuerte aumento de precios en el mercado mayorista, no está beneficiando a las compañías eléctricas como Endesa, ya que tenemos vendida a clientes energía a precios menores de los que está marcando el pool", ha señalado Bogas, que además ha pedido la reforma de la tarifa regulada "para proteger a los clientes domésticos de la volatilidad del mercado”.
Sobre la propuesta del Gobierno para reducir la remuneración de las plantas nucleares, eólicas e hidroeléctricas operativas desde antes de 2005 detrayéndoles los costes de CO2, el consejero delegado de Endesa ha valorado que "esta propuesta está basada en fundamentos erróneos, como que esas instalaciones están totalmente amortizadas, pese a las ingentes inversiones realizadas en ellas desde el año señalado en el anteproyecto de ley. Confiamos en que, tras las propuestas de cambios en el texto del anteproyecto sugeridas por la CNMC y como fruto del proceso de tramitación parlamentaria en el que todas las partes implicadas serán escuchadas, el resultado final sea más razonable".
Mantiene las previsiones para el ejercicio
En cuanto al comportamiento de las principales magnitudes económicas, la empresa ha obtenido un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 1.879 millones, un 19% menos que en el primer semestre del año anterior. En términos comparables, excluyendo el efecto neto de las provisiones de 2020, el descenso se queda en el 4%. La adversa coyuntura mencionada ha afectado al comportamiento de los negocios liberalizados (Generación y Comercialización), que son los que fundamentalmente reducen su ebitda en los primeros seis meses de 2021 respecto a 2020. Por su parte los ingresos aumentaron un 15,6% hasta los 10.272 millones.
Las cifras se han situado en línea con las estimaciones del consenso de analistas de Bloomberg, que preveían un beneficio neto de 827 millones y un ebitda de 1.870 millones.
No obstante, Endesa espera una normalización progresiva de las condiciones de mercado para el segundo semestre del año. Además, apunta que está tomando decisiones de gestión para compensar el efecto de la volatilidad de las materias primas en la cuenta de resultados. Por ello, la compañía indica que mantiene los objetivos fijados para este ejercicio: 4.000 millones de ebitda y 1.700 millones de resultado ordinario neto.
En lo que respecta a la deuda neta, alcanza los 8.200 millones de euros, lo que supone un alza de 1.300 millones derivada de la coyuntural evolución negativa del flujo libre de caja y del pago del dividendo a cuenta de los resultados de 2020 realizado en enero. De todas formas Endesa puntualiza que el coste de la deuda se mantiene "extraordinariamente bajo", con un interés medio del 1,7% (misma cifra que al cierre del año pasado).
Avance en renovables
Por otro lado, Endesa progresa en la promoción de su portfolio de renovables. La cartera total asciende a 52.900 MW, 11.000 MW más que a cierre de 2020 y tiene 7.000 MW con punto de acceso y conexión a la red concedido (300 MW más que a final del pasado año).
Actualmente dispone en fase de ejecución plantas solares y eólicas que suman 2.500 MW, lo que da confianza en el cumplimiento de los objetivos de puesta en marcha de nueva potencia limpia para 2021 (en total, 700MW). De ellos, 900MW tienen fecha estimada de entrada en operación en 2022, parte de los cuales puede acelerar su construcción igualmente. Junto a ello, Endesa tiene una cartera de proyectos de almacenamiento de 9.700 MW, de los que 1.600 MW se encuentran asignados a proyectos renovables en una fase de madurez administrativa.
En total, Endesa ha desarrollado inversiones de más de 700 millones en el semestre para impulsar su estrategia de descarbonización y electrificación, un 15% más que en el mismo periodo de 2020. El 85% de esa inversión está ligada a cuatro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos por Naciones Unidas.