Cada día hay más gente en España interesada en el mundo del trading intradía. Atrae mucho, en gran parte, por la inmensa información que existe en Internet con publicidad engañosa mostrando grandes casas, Ferraris...
También las
criptomonedas han hecho su trabajo con esas rentabilidades que se anuncian y divulgan. De hecho, respecto a estas recibo muchos mails y gran parte de ellos con un mensaje: «Quiero invertir en criptos y cuándo doble el dinero, saco lo invertido y dejo el resto ahí como una inversión a largo plazo».
Ser day trader está considerado una de las profesiones más difíciles del mundo, y es porque tenemos que estar en lucha continua con nosotros mismos. La psicología en este negocio es vital.
Aun considerando ser afortunado por tener un sistema de inversión rentable, luego hay que aplicarlo al mercado y es aquí cuándo la cabeza juega malas pasadas y se cometen errores.
Incluso con un sistema completamente objetivo, las personas le añadimos subjetividad a la operativa y por eso mismo se suele fallar.
Cuando uno comienza se cometen unos errores, pero con los años aparecen otros fallos que antes no tenías.
Les voy a exponer en este articulo algunos de estos errores (no todos porque hay muchos) identificados en mis más de tres décadas en los mercados financieros y 18 años impartiendo formación.
En todos estos años como profesor, y con el número enorme de alumnos que han pasado por mi aula, tengo tal cantidad de situaciones reales que podría escribir un libro. Nos centraremos en las más comunes.
Una vez el alumno pasa por un periodo en demo que no va más allá de dos semanas (más lo veo una pérdida de tiempo), es cuándo se comienza a aprender de verdad. Tienes el dinero real en el mercado, se desatan los demonios y llegan los errores de principiante, que son tres:
Primer error del trading: miedo
Es un clásico y es el primer error que cometemos todos al principio. El sistema marca una señal de entrada y el trader no entra por si finalmente no se produce el movimiento y pierde dinero. Esto es por una falta de confianza, que por otra parte es normal ya que se tiene que tener la sensación positiva de cerrar una buena operación para comenzar a ir teniendo confianza.
Previamente, al comenzar con dinero real, recomiendo hacer paper trading a tiempo pasado, pero lo más real posible.
Es decir, nos vamos de forma aleatoria a cualquier día de cualquier año y nos ponemos al final de la sesión, sin caer en la tentación de ver la parte derecha del gráfico para comprobar qué ha pasado. Primero analizamos, luego avanzando vela a vela decidimos entrada y a continuación vemos el resultado.
La única diferencia de hacer este entrenamiento con respecto al entorno real es que aquí a golpe de ratón vamos pasando velas de 5 minutos y en la realidad tenemos que esperar ese tiempo. Y es en esa espera cuándo entra en juego la psicología.
Al realizar mucho paper trading iremos cogiendo más confianza interior y estaremos en mejor disposición de aguantar una posición abierta.
No olvidemos algo muy importante: se trata de pensar que lo peor que puede pasar es que nos salte el stop de pérdidas, que previamente tenemos que tener aceptado. Y si nos supone mucho dinero para nuestra cuenta, hay que bajar el lotaje hasta el punto que estemos más cómodos.
Segundo error del trading: impaciencia
Hay sesiones que el mercado pone a prueba la paciencia. Muchos terminan entrando antes sin que el sistema que utilizan haya dado la señal.
O bien tienen una posición abierta conforme al sistema, pero tarda demasiado en llegar al objetivo de beneficio y se termina cerrando antes de tiempo.
Posteriormente se comprueba que sí se cumplió el objetivo, esto con una orden OCO queda solucionado. Cuidado con esto porque, curiosamente, he comprobado que el dejar de ganar pesa más que el hecho de perder porque ha saltado un stop.
Si el trader ha ganado dinero es con la sensación que ha de quedarse, no lamentarse por no haber ganado más. Oportunidades hay casi todos los días.
Tercer error del trading: "Cuenta pequeña, beneficios grandes"
Hoy en día, hay un aluvión de mensajes publicitarios que proclaman que con 200 o 1.000 euros puedes ganarte un sueldo. Nada más lejos de la realidad.
Lo importante es entrenar a los traders para buscar un objetivo diario, por ejemplo, de 20 puntos del futuro del DAX. Salvo en las sesiones que el mercado abre en rango y el beneficio teórico es mayor, entonces hay que ir a por ello.
Este es un negocio de oportunidades y si llegan hay que aprovecharlas, cogiendo inicialmente los 20 puntos. El resto del lotaje lo dejamos correr protegido en break even.
Este beneficio diario hay que tenerlo en mente, porque el tener clara una ganancia diaria nos quitará de muchos problemas y nos permitirá disfrutar de la mejor operación, que es el tiempo.
Volviendo a mi beneficio diario, si yo hago la operación con un CFD la ganancia será de 20 euros, si es con un futuro minidax sería de 100 euros y si ya es el futuro grande tendríamos 500 euros y los 20 puntos serán los mismos.
Obviamente según que instrumento utilicemos las garantías que nos piden son más altas o mínimas. Lo que veo mucho es que con esa falsa idea inculcada por los mensajes publicitarios, se pretende ganar con poco lo que conseguiríamos con más capital.
Por eso, se cometen dos grandes errores. El primero es buscar un gran número de negocios, pero el mercado no da tantas oportunidades continuamente. El segundo es ir con todo lo que te permite la cuenta, obviando «la gestión de capital», que es tan importante o más que disponer de un buen sistema.
Como decía Calderón de la Barca «los sueños, sueños son» y pretender hacer con 1.000 euros lo mismo que con 10.000 e incluso 100.000 es un sueño que a todos nos gustaría, pero hay que enfrentarse con la realidad.
Un artículo de Carlos Galán (School of Trading Las Rozas)