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Santander, BBVA y Bankinter sufrirían menos impacto que la media de bancos europeos en el escenario adverso planteado por la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) en sus test de estrés, según reflejan los resultados de las pruebas de resistencia publicadas este viernes.
Banco Sabadell, por su parte, se ha visto más penalizado debido a que el escenario más adverso (e improbable) pone foco en España y Reino Unido como los mercados más afectados del mundo, solo por detrás de Perú, precisamente los dos países en los que la entidad desarrolla su actividad.
Los test de estrés de la EBA cubren un periodo de tres años, desde finales de 2020 hasta finales de 2023, con un escenario base y otro adverso.
Banco Santander tenía al cierre de 2020 una ratio de capital CET1 'fully loaded' del 11,89%. Los resultados de los test de la EBA apuntan que, en el escenario adverso, esta ratio se situaría a finales de 2023 en el 9,32%, por lo que el impacto sería de 258 puntos básicos.
BBVA sufriría un impacto de 303 puntos básicos en su ratio CET1 'fully loaded', que se situaría en el 8,69% al final del periodo. El impacto para Bankinter sería de 104 puntos básicos, con una ratio 'fully loaded' del 11,25% a finales de 2023, mientras que Banco Sabadell situaría su ratio en el 6,54% en el escenario adverso en 2023, con un impacto de 548 puntos básicos.
En cuanto a los resultados en la ratio de solvencia CET1 'phased in' (ratio de capital calculada según el régimen transitorio), Banco Santander la situaría en 9,93% en el escenario adverso (-240 puntos básicos), BBVA en el 8,15% (-319 puntos básicos), Bankinter en el 11,25% (-104 puntos básicos) y Sabadell en el 7,07% (-550 puntos básicos).
Respecto a los resultados para el conjunto de los bancos europeos, el impacto en el escenario adverso en la ratio de capital CET1 'fully loaded' es de 485 puntos básicos, lo que sitúa su ratio para finales de 2023 en el 10,2%, y de 497 puntos básicos en forma transitoria, situando esa ratio en el 10,3% en forma transitoria.
Así, los impactos sufridos por Banco Santander, BBVA y Bankinter son inferiores a los de la media de los bancos europeos que se han visto sometidos a las pruebas de resistencia de la EBA, aunque sus ratios de capital al final del periodo se situarían por debajo.
El impacto en Sabadell sí superaría al de la media de bancos europeos, aunque la ratio de capital resultante en el peor escenario todavía se mantendría por encima del mínimo del 5,5% que el mercado toma como referencia en el escenario adverso para considerar que una entidad ha superado los test de estrés.
Las pruebas de resistencia, que el pasado año no se desarrollaron por la pandemia, se han realizado a una muestra de 50 bancos de 15 países europeos, de los cuales 38 están bajo jurisdicción del Mecanismo único de Resolución (MUS). La EBA inició las pruebas de esfuerzo el pasado 29 de enero y decidió excluir a CaixaBank, al encontrarse en el proceso de fusión con Bankia.
ESCENARIOS HIPOTÉTICOS DE LAS PRUEBAS DE RESISTENCIA
Los test de estrés incluyen un escenario hipotético en el que las entidades tienen que superar una dura recesión de más de tres años de duración. Debido el efecto de la crisis sanitaria, el escenario adverso de este año toma como referencia una narrativa en la que el Covid-19 todavía siga presente en un entorno de tipos de interés más bajos y por más tiempo. Ante esto, la confianza negativa prolongaría y endurecería todavía más la contracción económica.
En concreto, el escenario planteado por la EBA parte de una caída del producto interior bruto (PIB) de la Unión Europea (UE) en 2020 del 6,9%. A partir de ahí, los bancos han tenido que simular un escenario en el que la economía se contraiga un 1,5% en 2021, un 1,9% en 2022 y un 0,2% en 2023.
En lo que respecta al desempleo, los bancos han manejado un escenario en el que el paro aumentaría en 4,7 puntos porcentuales en estos tres años, llegando a un acumulado del 10% en 2021, del 11,2% en 2022 y del 12,1% en 2023.
El panorama macroeconómico del examen se completa con una inflación media en los Veintisiete de apenas el 0,7%, un descenso en los precios de los inmuebles residenciales del 16,1% y de hasta 31,2% en el caso de los inmuebles comerciales. Además, los precios de las acciones en los mercados financieros globales caerían en torno a un 50% en las economías avanzadas y hasta en un 65% en las economías en desarrollo.
En el caso de España, los bancos han tenido que hacer frente a una caída simulada del PIB del 0,9% en 2021, del 2,8% en 2022 y un crecimiento del 0,5% en 2023. Además, también han tenido que incorporar en sus cálculos un nivel de paro que llegará hasta el 21,9% en 2023, frente al 14,3% en el escenario base.
Fuente: EUROPA PRESS
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