El 2OHOA es un ácido graso sintético, como ocurre con muchos compuestos lipídicos, puede provocar molestias gastrointestinales (diarrea, náuseas, dolor abdominal) si se introduce de forma rápida o en dosis altas.
Eso es prácticamente nada para un oncólogo en comparación con las inmunoterapias que han sido tan celebradas en las últimas dos décadas por su perfil de toxicidad más manejable que la quimioterapia, pero no están exentas de provocar efectos adversos inmunomediados graves (colitis, hepatitis, neumonitis, endocrinopatías) en un porcentaje significativo de pacientes. Por eso SurVaxM limita mucho el estado funcional y edad en su ensayo de glioblastoma, juegan en otra liga.
El protocolo de los ensayos del 2ohoa está basado en eficacia y creo que se inicia de golpe con la dosis máxima que se ha establecido como tolerable pero en la práctica clínica los médicos podrán ajustar la pauta de forma más progresiva para evitarlas en aquellos pacientes con sensibilidad intestinal o preferencia por ausencia total de moléstias intestinales:
- iniciar con dosis más bajas,
- aumentar de forma escalonada,
- detener o ralentizar la escalada si aparecen molestias intestinales.