El BCE se salva a sí mismo. En primer lugar pediría aportación a los países miembros de la eurozona. Ante el más que probable levantamiento de dedo corazón de varios de ellos y la imposibilidad de obtener el dinero necesario de otros, le queda la otra opción, que es imprimir el dinero que necesite.
Mientras tengas una imprenta legal de billetes, es imposible que te arruines. Lo que puedes hacer es arruinar a todos los demás.
Por otra parte las compras de deuda soberana por parte del BCE son declaradas sobre la semana anterior. No se sabe lo que está comprando, pero se sabe lo que ha comprado. Y sí lleva mucho tiempo cargándose de deuda soberana de todos los PIIGS. Si no fuera porque el BCE no participa de la quita de Grecia, se habría vuelto insolvente con ella.