Ni me hables del PIB, que ese es otro cantar, pero de los "quejíos" rompedores del alma. ¡Qué vergüenza!
Solo dijo depósito y punto. Ni me habló de estructuras, ni de nada, solo un interés, como de risa. Sin comentarios, le dije que no me interesaba y punto. Ni me molesté en decirle si consigo más en los bancos o no. Me pareció ridículo ofrecer eso, cuando jamás les he contratado otra cosa que no sean seguros de inmuebles y coches.
Mejor del concurso hablamos en privado, por lo que pueda pasar, si es que se lee, que como sabemos bien, no se lee nunnnnnncaaaaaaa, jajaaaaaa
(¡Ay, qué mala soy!)
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Pues sí, como lo lees, 6250 con algo, si no recuerdo mal ha sido la cantidad que se ha embolsado la moza por buscar un beso de la flaca, bueno, de la gordita, jajaaaa.
¿Mercedes de Aluminio? Jajjaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, permíteme que me ría. El coche, matrícula de hace por lo menos unos 10 años, oscuro, pequeño, con la chapa más golpeada, por todos los lados y alguno más, que la cara de un K.O. derrotado en el suelo del ring.
El coche era una auténtica mierda. Sí, lo siento, ya sé que suena fatal, pero es que es la mejor descripción de cómo estaba.
Fíjate que mi marido, que antes de ver el coche me había echado siete mil broncas seguidas por tener que estar casado con "el terror de las rotondas" como poco, jajaaa, me acompañó a la Poli al atardecer, ya era casi de noche cuando acudimos por segunda vez y estaba nerviosa y no quería conducir más. Nos encontramos con la moza, que a esas horas venía -muy digna ella- a denunciarme. (¡Menos mal que yo fui a autodenunciarme a las cuatro de la tarde, nada más darle el golpecito!) Bueno, pues cuando el guiri vio la carrocería del carricoche de la moza, por lo bajines y en alemán me dijo: "¡Esta ha buscado el golpe fijo para ver si puede comprarse otro coche, porque este se le va a caer cualquier día a cachos!"
Ella, salió de su automóvil como si nada, porque creía que no estábamos en la poli a esas horas... En cuanto me vio, me preguntó si era la dueña del rojillo y si le había dado un golpe en la rotonda. Asentí. Bueno, pues fue decir que sí y empezar a doblar el cuello y a decir que se encontraba mareada.
¡¡Leñe!! ¿¿Y tardas cuatro horas en presentarte en la policía y no has ido primero al hospital a que te hagan un chequeo y te has ido tan pancha a trabajar?? ¡¡Qué fuerte, Mua!!
Estos más que generosos, lo que han sido es tontos. ¡Luego escatiman a su cliente 200 euros!
¿Acabar la Picaresca? ¡Juas, esta es la Lazarilla del Mediterráneo en persona! ¡Menudo morro!
Te aseguro que no te pongo foto del rasguño de mi coche, porque ya va pintado y ni se ve, que si no, te lo ponía porque es absurdo alegar que has podido sufrir un latigazo cervical a 20 por hora, si llegaba, con semejante rasguñín...
Un abrazo
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.