No solucionas el problema. Porque quitarías un montón de escaños a gran parte del territorio más despoblado (las dos Castillas, Extremadura y Andalucía) y que precisamente vota a partidos "unionistas", para dárselo precisamente a territorios más poblados, de entre los cuales hay grandes masas nacionalistas (Cataluña, País Vasco y los incipientes pancatalanismos del Levante valenciano).
Por ponerte un ejemplo, quitas 2 escaños "unionistas" de Castilla y León, para dárselos a Madrid y Cataluña (de manera que un escaño va a un partido "unionista" y el otro va a un partido nacionalista).
Además, no estoy muy de acuerdo con ponderar el voto exclusivamente por población. Haré una reducción al absurdo: si todo el mundo viviera en grandes urbes como Barcelona y Madrid, el 90% por ciento del territorio no tendría representación parlamentaria y eso ahondaría aún más en la precariedad de la España vaciada.
El único contexto en el que podría estar de acuerdo en lo que tú propones sería que el Senado fuera una verdadera cámara territorial que hiciese de contrapeso al Congreso, y no el cementerio de elefantes que es ahora. Pero la única manera de que el Senado fuera una verdadera cámara territorial sería que hubiera listas abiertas. Y eso es un sueño imposible en esta partitocracia.