En mi opinión eso desgraciadamente ya no lo veremos...
Creo que F.G. Paramés es un líder nato y ambicioso al que le gusta ser el indiscutible número 1 de la empresa.
Y creo que Álvaro Guzmán de Lázaro es un gestor que ha ido creciendo exponencialmente y esa evolución profesional le hace querer tener más protagonismo. Sin embargo, F.G. Paramés probablemente pretendía que éste siguiera en un segundo plano junto a él, lo cual Álvaro Guzman no admitió, por lo que F.G Paramés finalmente no fue a Azvalor y fundó su propia gestora.
Y yéndonos al símil futbolístico ocurre lo mismo que en el F.C. Barcelona. Neymar crece y necesita más protagonismo en el equipo. Y no se conforma con estar a la sombra de Messi. Como Messi no está dispuesto a perder esa condición de líder incontestable, pues a Neymar no le queda más remedio que ir al PSG para seguir creciendo y poder sentirse más importante en su nuevo equipo.
A veces esta lucha de egos es inevitable porque el crecimiento profesional de las personas hace que muchas no estén dispuestos a estar toda la vida en un segundo plano y aspiren a estar en el primero, o al menos en igualdad de condiciones que el primero. Y si se junta con alguien que no quiere compartir esa condición de líder, pues ocurre lo que tiene que ocurrir...
Sin embargo, Fernando Bernard, quizás sea menos ambicioso y asume plenamente estar en segundo plano, donde se siente bastante cómodo. De hecho, en la última conferencia anual de Azvalor, Álvaro Guzman no le da apenas protagonismo. En ese sentido, creo que Paramés era más sensible con Álvaro Guzman (ver por ejemplo conferencia anual de Bestinver del año 2009).
Y un caso análogo al de Fernando Bernand sería el de Charlie Munger (con Warren Buffet).