Pues mira, coincido contigo en que el café para todos no ha sido una buena solución a largo plazo. Aunque tembién reconozco que si no hubiera sido así, seguramente a Suárez se lo hubieran comido con patatas. No olvides que, aún hoy en día, sigue existiendo ese infantilismo de "yo quiero lo mismo que el vecino" y así nos va.
Otra coincidencia: Efectivamente la gran metedura de pata fue el recurso del PP al TC. Pero eso de negociar políticamente en España no se lleva mucho. Bueno, el problema es que aquí hay políticos de vía estrecha pero muy pocos estadistas (si es que alguna vez hubo alguno).
Por lo demás, yo no soy nacionalista ni antinacionalista, aunque creo que los nacionalistas tienen algunas virtudes, como también las tienen los demás. En realidad creo que la virtud está en la pluralidad política. De lo que sí soy consciente es que si la recogida de basura o la instalción de un aparato de Rayos X depende de un ministro que está a 400 km de mi casa, mi basura se amontona y a mí no me hacen la rediografía nunca.
En cuanto a los parlamentos, el problema no está en su existencia, sino en su coste. Los ayuntamientos tienen un miniparlamento formado por el pleno de los concejales y en muchos municipios es gratis porque los concejales no cobran ni un céntimo y además tampoco les da por robar. Que eso de que hay corrupción porque ganan muy poco es otra de las grandes mentiras.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.