El PSOE se hunde....

Entre unas cosicas y otras a Rajoy me lo invisten.

Espero que ahora los peperos (o pepistas, o simplemente marianistas o marianeros, que no se como mejor denominarlos), hagan también el mismo seguidismo a estas declaraciones de González como el que ya hicieron cuando reflexionaba en favor de un "acto de responsabilidad".

Y sí, aquí debo decir que comparto su reflexión (aunque sea de perogrullo), si bien el PP es el partido más votado, Mariano es el candidato más vetado ahora mismo.

Se busca candidato; características deseadas, que sea capaz de comerse el pensionazo en solitario, sin esconderse tras el pacto de Toledo.

rajoy es el candidato mas votado y es el quien tiene que dirigir españa...y mas pronto que tarde ocurrira
saludos170
PD es infinitamente mejor que sanchez

Pues yo creo que, admitiendo que sea el más votado (cosa incierta), no ha sido suficientemente votado. Es como el estudiante que saca un 4, tiene mejor nota que el que saca un 2 pero queda igualmente suspendido.
Así que, Sr. Rajoy: queda suspendido también en septiembre.

España tendría hoy Gobierno si once diputados socialistas se hubieran abstenido en la segunda votación. Habría sido muy fácil que el viernes once de ellos se hubieran quedado en sus casas alegando cualquier indisposición. Su grupo les habría impuesto una multa, pero sus escaños los tendrían garantizados aunque vuelvan a celebrarse las terceras elecciones. Quienes les ponen o les quitan de las listas del PSOE son esos barones regionales que tanto hablaban de terminar con el bloqueo. Unas palabras suyas habrían bastado para que sus supuestos deseos se convirtieran en realidad.

Si los periodistas nos saltáramos el secreto profesional y los dirigentes del PP la confidencialidad de sus conversaciones privadas, varios de esos barones quedarían reflejados como mentirosos compulsivos. Lo han sido. Durante semanas han estado pregonando como iban a convocar un Comité Federal, qué pasos iban a seguir para frenar a su secretario general. Y, por supuesto, criticando a Sánchez con frases hasta desagradables en términos privados. Su secretario general sonreía cuando le llegaban esas noticias.

«Les tiene tomada la matrícula», dicen en Moncloa. El propio Rajoy hace tiempo que comenzó a ignorar esos cantos de sirena que le llagaban de ministros y dirigentes del PP, «que sí, presidente, que fulanito garantiza que en última instancia te dejarán gobernar». Él mismo ha recibido llamadas de Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero o Alfredo Pérez Rubalcaba en los últimos meses, lo que no tiene nada de particular. Habla con ellos con frecuencia. Quienes mandan en Ferraz les consideran las viajas glorias que son. Su peso en las decisiones es nulo.

Susana Díaz, que estuvo desaparecida todo el verano, reapareció en público horas antes de la votación del viernes pero se negó a hacer declaraciones. Se esperaba mas de ella, aunque en el entorno de Sánchez se la considera incapaz de dar un golpe en la mesa. Unos creen que por falta de ganas y otros insunuan porque todavía no han acabado de publicarse las supuestas conexiones de su marido con los cursos de formación en Andalucía.

Guillermo Fernández Vara, partidario de un Comité Federal que aclarara el asunto, hizo su propuesta de convocatoria por la radio, no en Ferraz. Los presidentes de Castilla-La Mancha, Asturias y Aragón también han aparecido pidiendo el desbloqueo. A la hora de la verdad permanecieron mudos y consintieron que la culpa de la insólita situación que vivimos deje de ser la culpa de Pedro Sánchez. Lo es de todos ellos. Unos cobardes.

Curri ValenzuelaCurri Valenzuela

Fue precisamente ayer cuando el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, esgrimía que «pactar no es traicionar». Y en traición debe estar pensando ahora mismo el líder del PSOE, Pedro Sánchez, tras enterarse del «encuentro» que mantuvieron en un conocido restaurante de Madrid el propio Zapatero, Pepe Bono, Guillermo Fernández Vara, Emiliano García-Page y otros siete cargos socialistas, tal y como informaba en exclusiva ESdiario.
Tras la fallida investidura de Mariano Rajoy y la insistencia de Sánchez en el «gobierno del cambio» parece que los cimientos socialistas se tambalean. Sobra decir que la mayoría de los presentes en esa comida se postularon a favor de una abstención final del PSOE que facilitase el gobierno del PP. Y también sobra decir que la figura de Sánchez tampoco es del agrado de los presentes, tal y como han manifestado en varias ocasiones ante los medios.
José Bono y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a su llegada al restaurante
José Bono y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a su llegada al restaurante
Esdiario.com
Según explican en este diario, el expresidente del Gobierno, el expresidente del Congreso y los actuales presidentes de Castilla-La Mancha y Extremadura llegaron al restaurante por separado y con sus respectivos coches oficiales, situación que provocó un auténtico colapso circulatorio en el barrio de Salamanca.
Aunque no han trascendido de qué hablaron en ese almuerzo, que duró cerca de dos horas, todo apunta a que se hurdía una «conspiración». Según ha podido saber ESdiario, la cita se había programado horas antes del tercer día del Pleno de investidura y las intervenciones giraron en torno a la obcecación de Sánchez en su "no es no" y las posibles consecuencias negativas que puedan derivarse para el PSOE de esta posición.

Sánchez busca el aval de la cúpula para un pacto aún imposible. El líder socialista abrirá una ronda de contactos este lunes mientras Podemos y C's mantienen sus vetos.
http://www.elconfidencial.com/elecciones-generales/2016-09-05/pedro-sanchez-aval-cupula-psoe-empezar-negociacion-podemos-ciudadanos_1255112/

La investidura fallida de Mariano Rajoy y la imagen de bloqueo que trasladaron las diferentes fuerzas políticas durante el debate de esta semana acercan la posibilidad de unas terceras elecciones. Un escenario al que abocarían los partidos de la oposición por su profundo rechazo al candidato popular y que, paradógicamente, no tendría otro efecto que incrementar la mayoría que actualmente ostenta el PP en la Cámara. Así se deduce de la última encuesta de NC Report para LA RAZÓN, según la cual el PP reeditaría su victoria, con un 34,8% de los votos, y se colocaría a 61 escaños de distancia del PSOE. La expansión electoral de los populares –que contrasta con el estancamiento de sus rivales– tendría además un importante efecto para la gobernabilidad, ya que en base a su actual pacto con Ciudadanos lograría la mayoría absoluta, sin necesidad de apoyarse en otros partidos. Las terceras elecciones, no obstante, supondrían un importante correctivo para las formaciones con representación en el arco parlamentario, pues todas –sin distinción– registran una significativa pérdida de votantes.
El partido de Mariano Rajoy continúa su ascenso. Si hoy se celebrasen elecciones, los populares incrementarían un 1,7% sus resultados, lo que les reportaría entre cinco y nueve diputados más. A pesar de perder 343.185 votantes, es la única formación que mejoraría sus datos respecto a hace tres meses. Con el 34,8% de los votos, el PP conseguiría entre 142 y 146 parlamentarios, lo que aumentaría sus expectativas de formar Gobierno junto a Ciudadanos. El PP es el partido con el voto más fidelizado, un 89,7% de quienes confiaron en Rajoy en junio volverían a hacerlo en unos eventuales nuevos comicios. Las principales fugas de electores populares se dirigirían a la abstención (8,4%) y a Ciudadanos (1,4%). Por segmentos de edad, el PP es el partido en el que confían los votantes mayores de 45 años y el segundo en el segmento de entre 30 y 44.
A pesar del convencimiento existente en Ferraz de que unos nuevos comicios fortalecerían al PSOE, lo cierto es que según NC Report serían ciertamente perjudiciales. El PSOE no sólo no conseguiría mejorar sus resultados, se mantendría entre 82 y 85 diputados, sino que registraría un importante retroceso en votantes, convirtiéndose en el partido que más electores perdería: 556.709. El enrocamiento de Pedro Sánchez en el «no» alejaría sus opciones de encabezar una alternativa ya que vería incrementada su diferencia respecto al PP en nueve escaños, hasta los 61. Con un 22,4% de los apoyos, los socialistas bajarían de los cinco millones de votantes, hasta los 4,8. No obstante, un 84,9% de quienes confiaron en Sánchez en junio volverían a hacerlo ahora, aunque un 10,7% optaría por la abstención y un 1,8% votaría a Ciudadanos. Es curioso señalar que los ex votantes del PSOE preferirían decantarse por el PP (1,3%), antes que por Podemos (0,8%). Por segmentos de edad, los socialistas no dominarían en ninguna horquilla generacional, aunque lograrían imponerse a Podemos en los de mayor edad, a partir de 45 años.
Tampoco Pablo Iglesias tiene razones para el optimismo. La formación morada es la que más escaños cedería respecto a junio. Si hoy se celebrasen elecciones, Podemos retrocedería entre cuatro y un diputado y perdería 550.734 electores. Los partidos que suponen una rémora para la coalición son Podemos (perdería hasta tres) y Compromís (que podría ceder un escaño). Con el 20,7% de los votos, el partido de Iglesias obtendría entre 67 y 70 parlamentarios y perjudicaría la viabilidad del frente de izquierdas que defiende. La formación morada fideliza a un 86,6% de quienes optaron por ellos el 26-J y quienes decidieran abandonar el partido lo harían hacia la abstención (7%) y hacia el PSOE (3,5%). El ámbito en el que los de Iglesias siguen imparables es entre el público joven: Podemos es la formación que lidera el voto de los menores de 45 años y la tercera opción para los mayores de 44.
Como ocurriera con el pacto con el PSOE, el rubricado ahora con los populares no le serviría a Albert Rivera para despegar sino que se convertiría en una suerte de lastre, que le haría perder 493.769 votantes. Si hoy se celebrasen unos terceros comicios, Ciudadanos cedería entre uno y dos diputados, lo que se traduce en un punto porcentual en volumen de voto. Sin embargo, con sus 30/31 escaños, la formación naranja sería decisiva para la configuración del Gobierno y podría llevar a Mariano Rajoy hasta la mayoría absoluta. C’s es la formación con la fidelidad de voto más baja de los cuatro grandes, pues sólo un 75,1% de los que le votaron en junio volvería a hacerlo ahora. Sorprende, además, que tratándose de un partido de reciente formación sea también el que más electores arrojaría a la abstención, un 14,3%, seguidos del 9,5% que optaría ahora por el PP. En cuanto a segmentos generacionales, Ciudadanos no convence en ninguno de ellos, aunque es en los votantes de entre 30 y 44 años en los que tiene su principal granero electoral.
Una tercera convocatoria electoral, bajo la incertidumbre de su celebración el día de Navidad, aumentaría el descrédito político hasta niveles récord de abstención, que llegarían a rozar el 40 por ciento. La participación con respecto a junio decrecería en seis puntos, del 66,1% del 26-J al 60,2 por ciento. Además, todos los partidos registrarían un importante retroceso en número de votantes.

Los socialistas andaluces, que lidera Susana Díaz, están intensificando su presión sobre el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en las negociaciones que está iniciando para poner fin a la situación actual de bloqueo que atraviesa el país, después de que el presidente en funciones Mariano Rajoy no consiguiera los votos suficientes en el Congreso para salir investido.Tras celebrar la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A, el secretario de Organización, Juan Cornejo, ha descartado este lunes la solución que está buscando la dirección federal del partido entre el PSOE, Ciudadanos y Podemos, porque este acuerdo a tres bandas es "inviable", por el "veto cruzado" entre C's y la formación que lidera Pablo Iglesias. "No engañemos ni distraigamos a los ciudadanos" con esta posibilidad para formar gobierno, ha lanzado a Pedro Sánchez el 'número 2' de Susana Díaz, Juan Cornejo.Para Cornejo, la dirección federal del PSOE está buscando un acuerdo a tres bandas "con la buena voluntad de buscar una solución", pero por la posición de Ciudadanos y Podemos es "inviable".

El PSOE andaluz no ha mostrado ningún entusiasmo con su líder nacional. ¿Si hubiera unas terceras elecciones, el PSOE andaluz apoyaría a Pedro Sánchez? "No lo sé", ha soltado Cornejo, apelando a los "procedimientos" que deben abrirse si finalmente hubiera unos terceros comicios.Cornejo ha culpado de la situación a Rajoy y a su "incapacidad y falta de liderazgo" para formar una mayoría suficiente, por lo que considera que, en virtud de la opinión de todos los partidos, una renuncia suya "podría ayudar mucho al debate", aunque ha insistido en que el PSOE andaluz "no está ahora" en la abstención.Al ser preguntado sobre si una renuncia de Rajoy llevaría al PSOE andaluz a valorar esa abstención, ha respondido que es "incapaz" de avanzar eso ahora y ha agregado: "Cuando lleguemos al río cruzaremos el puente".Antes de la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A, la presidenta andaluza y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, ha sido abordada por los reporteros de televisión y ha señalado que, con la actual situación política en España, a los socialistas les toca ahora "reflexionar y debatir" y ha añadido: "Tengan la convicción de que estamos en eso"."Es lo que tenemos en la cabeza siempre y es lo que vamos a llevar a cabo", ha agregado Díaz, quien se ha mostrado convencida de que en España pasa igual y los socialistas apostarán "por lo mejor para nuestro país".

Sánchez se descarta para liderar una alternativa a Rajoy

El líder del PSOE abrirá, sin embargo, una ronda de contactos con todos los partidos, desde los nacionalistas al PP, para buscar una solución al bloqueo

por favor sanchez no nos marees mas ...que cansino eres85

Nueve minutos duró la intervención Pedro Sánchez -rostro pétreo, ceño fruncido- en la sala de prensa de Ferraz tras la ejecutiva socialista. Tiempo insuficiente para explicar dónde quiere llegar el PSOE, pero más que de sobra para encontrar contradicciones, ambigüedades, inexactitudes y alguna mentira. En tan sorprendente intervención no podía faltar el tópico de los tópicos en estos días: «el reloj de la democracia».

¿Quién es el inmovilista?
En su discurso Sánchez criticó la «cerrazón» de Rajoy y le acusó de «inmovilista». Ese es el argumento teórico que «obliga al resto de partidos a hablar» y que justifica su nueva ronda de contactos. Sin embargo, para convencer a C’s, Rajoy ha tenido que moverse bastante, por lo que su crítica es inexacta. Rivera y Rajoy han acordado 150 puntos, y eso implica cesiones por ambas partes. Quien no se ha movido, y ha perdido una excelente ocasión para ser influyente, ha sido Sánchez.

¿Cuántos votos consiguió Rajoy?
Dijo Sánchez que «es la primera vez en la historia de la democracia que un candidato que va a su investidura con más apoyos de los que sale. Entró con 170 y salió con 137». Como es sabido, en las dos votaciones de Rajoy sumó 170 síes, gracias a Ciudadanos y CC. La sesión se clausuró inmediatamente después de la segunda votación, después de que 33 personas ajenas al PP votaran «sí» a Rajoy. ¿Quiere decir Sánchez que Rivera y Oramas no apoyarán más a Rajoy? Eso está por escribir, pero Sánchez lo da por hecho.

¿Con el PP o contra el PP?
Sánchez insistió en que en su ronda de contactos también llamará al PP. Lo dice después de que hace 8 días considerara «perfectamente prescindible» la reunión con Rajoy y al a vez que establece un cordón sanitario en torno al PP: «En España hay dos bloques: uno de partidos que se identifican con el cambio y el bloque de un único partido que quiere que nada cambie».

Ronda de contactos, ¿para qué?
La estrategia que ayer planteó Sánchez ha conseguido el unánime rechazo de PP, Podemos y C’s. El argumento es el mismo: está haciendo electoralismo. Si él mismo insitió ayer en que «no me estoy postulando, que quede claro», ¿dónde quiere llegar? Sánchez no expresó sus verdaderas intenciones, o al menos fue calculadamente ambiguo.

Javier Lambán
El socialista critica la posición de la cúpula de su partido.

Guerra en el PSOE de Madrid: cesan al portavoz municipal de Hacienda
El inspector Ransés Pérez Boga ha sido relevado de sus funciones en el Ayuntamiento. La versión oficial es que "no tenía tiempo" para el cargo

PSM-PSOE

Guerra interna en el PSOE de Madrid: cesan al portavoz de Hacienda en el Ayuntamiento

El inspector Ransés Pérez Boga ha sido relevado de sus funciones. La versión oficial del es que "no tenía tiempo".

El concejal socialista Ransés Pérez Boga ha dejado de ser el portavoz de Hacienda de su partido en el Ayuntamiento de Madrid. El expresidente de la asociación española de inspectores de Hacienda ha sido apartado "porque no tenía tiempo".

El PSM ha confirmado el cese de Pérez Boga a este periódico. Aseguran que el concejal no podía compaginar con eficacia su labor como inspector en Galicia con la de portavoz de Hacienda en el Consistorio. Seguirá como concejal en funciones, pero sin una responsabilidad como la anterior.

No obstante, fuentes socialistas aseguran que el motivo esgrimido por el partido es una tapadera. "Quieren correr la lista para tener a alguien de confianza en una de las portavocías más importantes", relata un miembro de la federación madrileña a EL ESPAÑOL justo antes de apuntar directamente a la líder del partido en la Comunidad, Sara Hernández.

"Es un disparate que sólo obedece a las guerras internas del PSOE. ¿Quién mejor que el expresidente de la asociación de inspectores para ser portavoz de Hacienda?", concluye.

LAS DISCREPANCIAS DE PÉREZ BOGA

Pérez Boga mantuvo una fuerte discusión con la dirección de su partido a raíz de los premios de Bollywood.

El Gobierno de Carmena cometió varios errores administrativos cuando otorgó la subvención. Sin ir más lejos, confundió en nombre de la adjudicataria y se llegó a escribir en los papeles el nombre de una corporación inexistente.

Pérez Boga, como inspector, llegó a decir que aquello no se podía aprobar, en contra de lo que pensaba hacer la líder de su partido, Purificación Causapié. Finalmente, el concejal cedió y se adscribió a la disciplina de partido.

El socialismo madrileño se halla sumido en una guerra interna que comenzó con el cese de Antonio Miguel Carmona como portavoz en el Ayuntamiento. La dirección federal prefirió colocar en su puesto a alguien de la confianza de Pedro Sánchez.A partir de ese momento, el apoyo del PSOE a Carmena en el Ayuntamiento ha entrañado varias disputas internas.