Hola,
He pensado que quizás es buena idea dejar anotadas algunas consideraciones:
1. Triodos no nos ha estafado. Nos ha vendido un producto financiero que puede comportarse como lo ha hecho. Por el histórico del banco no era de esperar que sucediera esto, pero entraba dentro de las posibilidades. Y ha sucedido. No es una estafa. Es un giro repentino y sorprendente en el devenir de la economía, del banco, del producto, de nuestros ahorros. Pero no nos han estafado. Esto podía ocurrir y... lamentablemente... ha ocurrido.
2. No nos contaron que esto podía ocurrir. No sabíamos que esto podía ocurrir. El producto financiero que Triodos diseño y ofreció a sus clientes (CDA) es muy difícil de explicar y muy difícil de comprender, especialmente para personas sin conocimientos ni experiencia financiera. Cuando nos ofrecieron el producto dieron muy poca importancia a los riesgos y mucha importancia las ventajas y al componente ético de la adquisición, subrayando que adquirir el producto era la manera más ética de estar en un banco ético. La mayoría de nosotros no adquirimos el producto para ganar nosotros más dinero sino para que el dinero ético del banco ganara más valor.
3. El comercial de Triodos que nos vendió el producto CDA nos hizo firmar un Test de Conveniencia, lo cual acredita a la entidad, de cara a las instituciones reguladoras, que el cliente es inteligente, sabe leer y sumar y comprende la diferencia entre una cuenta de ahorro y una inversión en valores. Pero ese test está incompleto y no se ajusta a este producto y, además, el producto CDA es tan complejo y arriesgado (cosa que no nos dijeron claramente) que su adquisición hubiera requerido de la firma de otro test más específico, posiblemente uno que se llama Test de Idoneidad, el cual Triodos nunca nos dio. Dicho de otra manera, el producto CDA es un producto financiero muy complejo y los clientes habituales de Triodos, que no están familiarizados con la bolsa y la especulación financiera, es imposible que lo entiendan y, por lo tanto, es imposible que vean el riesgo que comporta y, por lo tanto, es imposible que asuman un riesgo que desconocen y, por lo tanto, es imposible que adquieran este producto de acuerdo a una ley que protege al cliente regulando que la entidad solo venda productos complejos a clientes con experiencia en productos financieros.
4. Muchos de los titulares de CDAs de Triodos hemos comprado estos titulares sin conocer plenamente el producto y lo hemos hecho por la confianza depositada en Triodos y porque el comercial del banco, entrenado por Triodos, nos ha explicado solo lo que le ha convenido para comercializar el producto. La mayoría de nosotros, de haberlo sabido todo, no hubiéramos contratado este producto. La mayoría de las personas con experiencia en finanzas, que saben cómo es este producto, no contratan este tipo de producto precisamente por que puede pasar lo que nos está pasando ahora y porque este producto tiene el riesgo de ser todo lo contrario a lo que nos dijeron: (A) seguridad (no hay seguridad) y (B) liquidez (puede no haber liquidez).
5. A partir del desplome del producto, por el cambio de situación financiera de Triodos, el producto CDA muestra su cara más fea. Pero los clientes no nos enfadamos por perder dinero, como quien juega su dinero en la bolsa y pierde, nos enfadamos porque no sabíamos que estábamos jugando a la bolsa. Triodos dice que nuestro dinero no estaba jugando en bolsa, que no especulamos, que es economía real. Pero lo cierto es que nuestro dinero sí estaba jugando en bolsa, en una bolsa muy pequeña y no regulada, que es la Bolsa Triodos, que es la que ha colapsado, lo cual ha sido inesperado, pero entraba dentro de las posibilidades y Triodos nunca nos explicó esto claramente.
6. Aquellas personas que esperen uno o dos años a que Triodos diseñe otro escenario financiero para este producto, se encontrarán dentro de uno o dos años con los mismos títulos, pero estos podrán subir o bajar de valor, posiblemente bajar, posiblemente bajar mucho. Entonces, quien vende pierde. Y si alguien aguanta para no perder, quizás pierde más.
7. Mientras tanto, Triodos informa a sus clientes de manera ambigua, poco comprensible, incluso confusa o imprecisa. Mi opinión es que también a veces han informado de manera engañosa. Decir que la pérdida del 30% es solo a título fiscal, es engañar. Es una pirueta lingüística para no decir que nos han quitado el 30% por "descuento administrativo". Un comercial de Triodos, en una reunión a tres con él y con mi asesor fiscal, nos reconoció que esto era realmente así. Nuestro 30% no lo tiene Hacienda ni otra Institución ni otro Banco, se lo ha quedado Triodos.
8. Existe la posibilidad de acudir a un abogado y a un juicio. Cada cual decidirá cuál es su mejor estrategia y cómo proceder. Lo que he expuesto anteriormente es mi visión de la jugada, no es ciencia, es lo que yo creo que es. Lo que cada uno haga a partir de este momento, tampoco es ciencia. Lamentablemente, nada es seguro.
9. Estaría muy bien aunar criterios y estar unidos. Pero no sé cómo. Quizás abriendo un grupo de Facebook, para empezar. Por otro lado, emprender una acción legal colectiva no parece muy viable, pues la contratación de los CDAs fue individual y cada uno tiene un perfil diferente y realizó la contratación de manera diferente. No es lo mismo tener estudios universitarios que no tener el graduado escolar, o haber contratado este producto en persona en la oficina que haberlo contratado por internet. Cuanto más fácil sea de demostrar que uno no entendió lo complejo del producto, más fácil será que el juez dictamine una práctica ilegal por parte de Triodos y se ponga del lado del cliente.
10. Muchos hemos perdido la confianza en Triodos, pero eso no quiere decir que perdamos la confianza en la banca ética o en los proyectos sostenibles, medioambientales, sociales, etc. Podemos criticar esta situación particular con Triodos pero eso no quiere decir que todo lo que se refiere a Triodos sea tóxico ni muchos menos que las personas que trabajan en él lo sean. Creo que es importante diferenciar y ser conscientes de que muchas personas, cuando se enteren de esto, señalarán la banca ética como una estafa y en ese cesto meterán la estafa de los productos ecológicos, de las renovables, de la propuesta verde, de las ONGs, etc. Pagarán justos por pecadores y saldrá perjudicada la confianza en algo que para muchos sigue siendo importante. Creo que es importante saber separar y cuidar cómo nos manifestamos para no dañar un movimiento que es mucho más grande que el simple dinero y que es, desde luego, mucho más grande que Triodos.