Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice Tristan.
No soy profesional de las subastas, pero si inmobiliario.
Los fondos de inversión no prosperarán en el mercado de las subastas, por que ellos funcionan -y los grandes fondos mucho más-, con un concepto que llaman TIR, o lo que viene siendo Tasa Interna de retorno, o tasa interna de rentabilidad, y esta tasa te da la rentabilidad en función de los momentos temporales en que tienes los out de money y los in, y en el caso de las subastas, por lo que llevo leído en las 210 entradas que llevo leídas en este blog, -esta es mi primera intervención-, no es tan rápido como a ellos -a los fondos- les gustaría, dejando a un lado el día que se coman un sapo, que por lo poco que llevo leído en el blog, tarde o temprano ocurrirá, lo que por aquí llaman una tercería de dominio, o un contrato de alquiler de renta antigüa, que no figuraba en ningún sitio, y que ningún algoritmo ha localizado.
Por ello, yo creo, en base a mi experiencia inmobiliaria, que los fondos entrarán y saldrán rápidamente de este negocio.
Aparte también se debe valorar que en inmobiliario la localización, pero no por barrios, por metros, dos números consecutivos de la misma calle, tienen un valor completamente distinto de venta. Hay calles de Madrid que entre una acera y otra hay una diferencia abismal, esto lo sé por que lo he vivido, no por que me lo han contado, dejando aparte estados de ruina o fincas en un estado catastrófico y que no va a comprar ni Wallas cuando lo vean, por que el que compra, si que lo ve, y hasta el último detalle.
Por ello yo creo que los inversores en subastas (no me gusta la palabra subastero), seguirán siendo artesanos, con producción muy limitada y nadie les echará de este mercado. Otra cosa distinta es que ahora aparezcan espontáneos, pero entrarán y saldrán, y algunos de ellos con las costillas raspadas.
En referencia al big data, creo que como herramienta, puede ser buena, pero solo como eso, y muchas oportunidades de negocio, posiblemente no las vea, por que en el negocio inmobiliario no todo es blanco ni negro y la escala de grises es ilimitada, y a parte de los trámites jurídicos que lleva una adjudicación y toma de posesión del inmueble, el negocio de las subastas, es en esencia un negocio inmobiliario.